Unidas Podemos revienta la unidad del Gobierno y acusa directamente a Teresa Ribera -y de soslayo a Nadia Calviño, vicepresidenta económica- de "negarse reiteradamente" a recuperar la prohibición del corte de suministros de agua, luz y gas a las personas vulnerables hasta el fin del estado de alarma.
La medida estuvo vigente desde el primer confinamiento hasta el 30 de septiembre pasado y la propia ministra portavoz, María Jesús Montero, anunció el martes pasado en rueda de prensa que "en los próximos días veremos el resultado de la negociación para ampliar la protección"... aunque en Podemos dicen no comprender el verbo ampliar: "No se puede ampliar lo que ahora mismo no existe, lo que el PSOE se niega a recuperar".
Ione Belarra es la mano derecha negociadora de Pablo Iglesias con el ala socialista del Gobierno cuando se trata de apretarle las tuercas al equipo económico de Calviño. Belarra, secretaria de Estado para la Agenda 2030, lleva meses encargada de presionar y un mes negociando que el Ejecutivo recupere la prohibición al "corte de suministros a las personas vulnerables".
"Avances significativos" o no
Este mismo lunes, Belarra estuvo en la sede del Ministerio de Transportes, reunida con el secretario general de Agenda Urbana, David Lucas, para negociar el texto del decreto para prohibir "todos los desahucios sin alternativa habitacional" hasta que acabe el actual estado de alarma, el 9 de mayo de 2021.
Según fuentes socialistas, hubo "avances significativos". Según las de Unidas Podemos, "no se avanzó nada, y la prueba es que el decreto no ha estado en la mesa del Consejo de Ministros por segunda semana consecutiva... el PSOE no hace más que retrasarlo porque quiere darle dinero público a los bancos y a los fondos buitre".
El enconamiento entre las dos alas del Gobierno, la comandada por Pablo Iglesias y la que lidera Nadia Calviño, es cada vez más radical y público. Ni una parte ni la otra lo oculta. Es más, desde el lado socialista y desde el morado parecen disfrutar del hecho de utilizar los medios de comunicación y las declaraciones públicas para airear sus diferencias.
Bomba a la rueda de prensa
Así, a media hora de la rueda de prensa del Consejo de Ministros, fuentes de Unidas Podemos se han mostrado en declaraciones a EL ESPAÑOL indignadas con los nulos avances en las negociaciones con el departamento de José Luis Ábalos por los desahucios y con el de Teresa Ribera por los suministros.
El entorno de Belarra y de Iglesias afirma que ambos seguirán presionando para prohibir los cortes de suministros ante la "negativa reiterada" de Transición Ecológica: "No podemos hablar de vivienda digna si no garantizamos agua, luz y gas a las familias"
Unidas Podemos lleva varias semanas trabajando para convencer a la Vicepresidencia cuarta del Gobierno de la necesidad de "prohibir los cortes de suministros mientras dure el estado de alarma", como medida complementaria a la suspensión de los desahucios, y garantizar así viviendas en condiciones dignas.
En este momento, según fuentes de Ribera, existe la posibilidad de que los consumidores en dificultades se acojan al bono social. Esta medida conlleva que sea el Estado el que, una vez reconocida su condición de vulnerables, se haga cargo del pago de los recibos a las grandes suministradoras energéticas.
"Ante la negativa reiterada de Transición, Unidas Podemos ha propuesto replicar el sistema acordado para la suspensión de los desahucios" y obligar a las empresas suministradoras de electricidad, gas y agua "a que soliciten a los servicios sociales un informe antes de proceder al corte" con el objetivo de comprobar si la familia se encuentra en situación de vulnerabilidad.
En la negociación de Belarra con Lucas ya se acordó que ésa fuera la vía para que las administraciones más cercanas a los ciudadanos, las CCAA y los Ayuntamientos, las que certificaran la vulnerabilidad de los afectados ante una autoridad judicial. Así se cumplirían los requisitos formales de "cumplir con el comité DESC de Naciones Unidas", del que es miembro España, y la efectiva de "proteger con un techo digno a las personas a las que obligamos a quedarse en casa durante la pandemia".
En opinión de Ione Belarra, "en pleno invierno no podemos hablar de una vivienda digna si no garantizamos también los suministros de agua, luz y gas que permitan a las familias calentar las casas, ducharse con agua caliente o cocinar". Además, UP considera imprescindible "que las grandes empresas energéticas del país, con beneficios millonarios, arrimen el hombro" en plena pandemia y se corresponsabilicen de la garantía de los derechos humanos dado que obtienen beneficio de comercializar un bien de primera necesidad.