Acaba de ascender a secretario de Estado para la Agenda 2030, en el efecto dominó que ha provocado la dimisión de Pablo Iglesias como vicepresidente segundo del Gobierno. Enrique Santiago (Madrid 1964), secretario general del Partido Comunista de España y exabogado de los narcoterroristas de las FARC en Colombia, cree que es el PP el que tiene problemas para entender la democracia. Así que este martes decidió darle unas cuantas lecciones "antifranquistas" al partido de Pablo Casado.
El nuevo miembro del segundo escalón del Gobierno alertó de que el Partido Popular está en una peligrosa "deriva radical y ultraderechista" a la que hay que poner fin. Y como estamos en campaña electoral en su Madrid natal, el líder comunista le dio contexto a sus declaraciones. Para enseñar al PP a no caer en el totalitarismo, dejó claro en una entrevista en Radio Euskadi que es "necesario" Pablo Iglesias, "referente de la izquierda y los demócratas".
Porque claro, hay que parar al PP... "y también a Vox".
Todo a pesar de que la deriva actual del PP, opina, "está dejando sin electorado al partido de Santiago Abascal" y que la formación de Génova "ha perdido cualquier referencia democrática" ya que practica un discurso "intolerante, de confrontación y guerracivilista".
Abascal y la lengua suelta
La mención a Abascal no es gratuita, claro. El líder de Vox no sólo formó parte del PP en sus años mozos, antes de fundar su propia casa en el frente más a la derecha del conservadurismo patrio, es que se ha erigido en su mayor némesis en el Congreso en estos meses, como líder del PCE y como ex abogado de la guerrilla colombiana. Cuando se supo que Santiago sería secretario de Estado, Abascal no tardó en recordar la facilidad de Santiago para soltar la lengua.
Hace año y medio, en plena campaña electoral de la repetición electoral del 10-N de 2019, Santiago concedió una entrevista a la revista satírica Mongolia. Y en ella aseguró que si en España se dieran "las mismas condiciones" que en la Rusia de 1917, "indudablemente" él mismo iría al Palacio de la Zarzuela y haría lo que Lenin le hizo al zar.
Quien lo conoce, sabe que es un hombre de fácil acceso al humor socarrón y desenfadado. Por eso el entrevistador quiso aclarar, preguntando expresamente por si eso significaba que Santiago "liquidaría a Felipe VI". A lo que contestó: "Eso ya depende de cómo se pusiera y lo que surgiera. Todos los procesos revolucionarios no los haces para matar a un zar, evidentemente. Eso es bastante anecdótico en el devenir de la historia. En su momento histórico estaba claramente justificado".
No parecía difícil que Abascal y su equipo de comunicación, hábiles en el uso de la hemeroteca, lo recordaran: "Han hecho secretario de Estado para la agenda 20/30 a un comunista, representante de las FARC, que sueña con asesinar a los reyes. Lógico; necesitan a un profesional para implantar una agenda totalitaria".
Enrique Santiago es hoy también diputado en el Congreso y hasta ahora ejercía como portavoz adjunto de Unidas Podemos. Llega al puesto para reemplazar en la Secretaría de Estado para la Agenda 2030 a Ione Belarra, que se ha convertido en la nueva ministra de Derechos Sociales.
Próximo a Iglesias
A pesar de ser el líder del PCE desde 2018, Santiago está considerado un cargo un dirigente muy próximo a Iglesias. No en vano, él ha sido el "jurista de cámara" del exvicepresidente y del grupo parlamentario en estos meses. Dada su formación en leyes y su militancia comunista también ha trabajado codo a codo con la otra sucesora de Iglesias, la nueva vicepresidenta tercera, Yolanda Díaz.
En realidad, a sus 57 años Santiago ha sido ya muchas cosas: secretario general de la Comisión Española de Ayuda al refugiado (CEAR) durante casi una década, abogado en las causas contra las dictaduras argentina y chilena -ejerció en las acusaciones contra Adolfo Scilingo y Augusto Pinochet-, vicepresidente de la Federación Española de Derechos Humanos... pero su nombre se hizo famoso primero en Colombia y luego en España cuando empezó a ejercer como asesor jurídico de las FARC durante las conversaciones de paz con el Gobierno de Juan Manuel Santos.
Como abogado ha ejercido también la acusación popular en casos como el de la muerte a tiros de un tanque estadounidense del periodista José Couso en Irak o en el mismo caso Bárcenas. Y quizá de los conocimientos adquiridos en esta causa, tamizados por su ideología y sazonados por el carácter combativo de su formación política, sacó Santiago sus lecciones de democracia al PP este martes.
Según dijo, tanto PP como Vox "quieren hacernos retroceder en derechos", ya que "niegan los derechos de las mujeres y limitan los de los trabajadores", afirmó. "Son los señoritos de siempre que han gobernado durante siglos, no es nada nuevo. Ahora pretenden volver", apuntó.
"El PP ya no tienen nada que ver a cuando tenían peso los democristianos. Ahora añoran el franquismo", seguía desarrollando este martes Enrique Santiago en Radio Euskadi. Porque además, llegó a a afirmar, el Partido Popular "no condena el autoritarismo fascista".
Eso sí, de este viaje de su lengua en libertad, el comunista no puso ejemplos que sustentaran el diagnóstico... aunque sí una receta: el "fundamental" papel de Iglesias para aunar en Madrid el voto en la izquierda y evitar que Isabel Díaz Ayuso siga gobernando tras un pacto con Rocío Monasterio, porque esto podría "abrir un ciclo de trágicas consecuencias para toda España".