La rebelión protagonizada por numerosas autonomías ha llevado al Ministerio de Sanidad a revisar las restricciones para hostelería, ocio nocturno y eventos publicadas en el Boletín Oficial del Estado (BOE) el pasado sábado.
Según ha podido saber EL ESPAÑOL, el departamento de Carolina Darias se ha puesto en contacto con los responsables regionales a lo largo de este martes para comunicar su cambio de parecer. Este movimiento se habría producido incluso antes de que se conociera la suspensión cautelar de las susodichas restricciones por parte de la Audiencia Nacional en Madrid.
De esta manera, el Ministerio de Sanidad enviará una nueva propuesta este mismo martes, para debatirla en el Consejo de Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) de este miércoles. Todavía se ignora cuál va a ser el giro del departamento.
Cabe recordar que las nuevas restricciones se aprobaron en el Consejo Interterritorial con el voto en contra de Madrid, Cataluña, Murcia, Galicia y Andalucía. País Vasco ni siquiera participó en el debate y Castilla y León se abstuvo. Todas estas regiones, junto a La Rioja, han protestado, desobedecido o anunciado medidas legales contra la nueva fórmula de restricciones que había propuesto Sanidad.
El principal motivo para la postura mostrada por las autonomías está en que las restricciones de apertura de bares o restaurantes ahora son obligatorias para todas las regiones, cuando antes eran voluntarias y se decidían en el seno de cada territorio.
Es de esperar que, si el Ministerio de Sanidad retira esta condición, seguramente las comunidades autónomas acepten las restricciones y se evite una mayor judicialización del proceso.
"El Ministerio busca consenso y trata de evitar la judicialización del proceso; sería una pena que vaya a depender de las autoridades judiciales porque no hayamos encontrado alternativas suficientes", ha resaltado en su rueda de prensa de los lunes el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón.
Posición negociadora
Simón ha explicado que todo el Ministerio, desde la parte más técnica, ha tratado de "mantener una posición negociadora a la hora de implementar y proponer todas las medidas".
Y "prácticamente todo lo que se propone" se trabaja antes en las ponencias y se eleva a la Comisión de Salud Pública "o se discute con múltiples actores". En este caso, Sanidad propuso en el Interterritorial una declaración de actuaciones coordinadas que permite la reapertura del ocio nocturno hasta las 2, ampliable hasta las 3, en aquellas zonas que estén en los niveles más bajos de riesgo.
También establece un límite horario para la hostelería, que no podrá abrir más allá de la 1 ni servir más tarde de las 24 horas, y restricciones de aforo, así como otras medidas para eventos multitudinarios y prohibiciones de fumar y vapear en la calle cuando no se puedan guardar los 2 metros de distancia, entre otras. Pero el problema, como se ha dicho antes, está en la imposición de dichas condiciones. Una protesta que ha encontrado respaldo judicial en la Audiencia Nacional.
"Si no se pueden aplicar las medidas por motivos judiciales, se buscarán alternativas lo más consensuadas posibles", ha dicho el epidemiólogo, recordando que en el pasado ya se dieron situaciones similares en la que "la posición judicial no coincide con las propuestas que salen de Salud publica o Sanidad". En su opinión, si se logra finalmente el consenso con esas alternativas que garanticen la seguridad suficiente, "los riesgos no serán demasiados".