El expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero considera "razonable" el "intenso" proceso que se está dando para acercar a los presos de ETA a cárceles próximas al País Vasco y cree que el Gobierno está tomando "decisiones claras" en este sentido.
"Es una línea que está ahí, a pesar de recibir críticas duras", señala Zapatero en una entrevista que publica este sábado el diario en euskera Berria en la que habla de cuestiones relacionadas con el fin de ETA y también de Cataluña y de la convocatoria de referendos por la independencia, sobre los que reitera su oposición.
"Cuando la democracia consolidó en España un modelo constitucional, un modelo de Estado democrático, se cerró el proceso prepolítico. Tenemos que tener eso claro. Todo lo demás, como se ha demostrado, además de no posible, es no deseable", destaca.
Habla de la necesidad de "un amplio proceso de diálogo" en Cataluña, para el que entiende que "se dan las condiciones". "Felicito al Gobierno por los indultos, estoy plenamente convencido de que va a ser una medida muy positiva, y deseo que esa mesa de diálogo se dedique a hablar de cosas concretas. El riesgo es que nos dediquemos a hablar de los principios inexorables", advierte.
Alude también al tiempo transcurrido desde que ETA anunció el cese definitivo de su actividad terrorista en 2011 hasta su disolución en 2018, un periodo durante el que gobernó el PP. "Fueron casi siete años. Eso, en nuestra opinión, se podía haber hecho en dos años", afirma.
Zapatero dice que su Gobierno siempre pensó que, "una vez que se había producido el anuncio decisivo, que era el final de la violencia", había que abordar "una serie de temas, que eran las consecuencias del conflicto", entre ellos la situación de los presos.
Meses después de la disolución de ETA, en septiembre de 2018, Zapatero se reunió con el coordinador de EH Bildu, Arnaldo Otegi, un encuentro en el que ratificó "tres cosas" que le parecían "importantes", la primera de ellas que el dirigente de la antigua Batasuna "había sido una persona decisiva en el proceso para llegar al fin de la violencia".
En segundo lugar, "que el fin de la violencia era para siempre" y, por último, que se necesitaba "todavía tiempo" para "un mayor reconocimiento del daño que se había producido". "Hace falta tiempo, y también tiempo para un mayor proceso de reencuentro", apostilla.
Para el expresidente, la conclusión "más fuerte" es que "los últimos diez años en el País Vasco, en Navarra, son los mejores del último siglo". "Si cogemos 100 años atrás, estos diez años de no violencia, y de paz, democracia y autogobierno, son los diez mejores años. Esto es lo que deseo explicar, transmitir", subraya Zapatero en su entrevista.