Vox ha señalado a Ricardo Rodrigo Amar, presidente de RBA, grupo editor de la revista satírica El Jueves, después de la publicación de una serie de viñetas de dirigentes del partido de ultraderecha y ha revelado dónde está su despacho en Barcelona.
La formación de Santiago Abascal ha puesto nombre y apellidos al editor y ha difundida una imagen suya para que se le reconozca. Ante esto, el Gobierno, el PSOE y Podemos achacan "prácticas fascistas" y "nazis" a Vox por señalar al editor de El Jueves.
"Se llama Ricardo Rodrigo Amar y es presidente de RBA, grupo que edita El Jueves. Su revista difunde odio contra millones de españoles a diario. Es posible que muchos de ellos le empiecen a exigir responsabilidades cuando le vean salir de su despacho de la Diagonal de Barcelona", dice el mensaje que ha publicado Vox en redes sociales.
En otro mensaje, Vox añade que "a izquierda está acostumbrada a que nadie le exija responsabilidades cuando comete barbaridades". "Por eso se enrabieta tanto cuando Vox lo hace. Lo seguiremos haciendo", ha continuado, en respuesta a la multitud de críticas a este señalamiento público de Ricardo Rodrigo Amar.
Viñetas satíricas
Estos mensajes de Vox contra El Jueves se deben a la publicación por parte de esta revista satírica de una serie de viñetas en las que se parodia a algunos dirigentes de Vox, entre ellos a Iván Espinosa de los Monteros, Rocío Monasterio o Jorge Buxadé, como si fueran monstruos con poderes.
"¡Descubre y colecciona a la asquerosa Pandilla Voxura al completo", escribió El Jueves en sus redes sociales.
Incitación al odio
Tras el señalamiento al editor de RBA, muchos han denunciado lo ocurrido y han mostrado su apoyo a los trabajadores de El Jueves. La Federación de Asociaciones de Periodistas de España ha catalogado lo ocurrido de "clara incitación al odio".
La revista ha dado las gracias por las muestras de apoyo. "Agradecemos infinitamente todas las muestras de apoyo. La próxima vez que tengamos un juicio os llamamos de testigos a todos. Un abrazo también a la gente que no deja de mencionarnos explicando lo irrelevantes que somos. Ojalá pudieseis entender la ironía, pero", escriben.