La exvicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo y el exministro de Transportes y exsecretario de Organización del PSOE José Luis Ábalos han regresado este miércoles al Congreso después de su salida del Gobierno el pasado mes de julio para escuchar la intervención del presidente, Pedro Sánchez, ante la primera reunión interparlamentaria del Grupo Socialista desde que estalló la pandemia.
El encuentro ha servido para que los parlamentarios socialistas ratificasen el relevo de Adriana Lastra por Héctor Gómez en la Portavocía del Congreso, y el de Ander Gil por Eva Granados, en el Senado, cambios aprobados el pasado lunes en la Comisión Ejecutiva Federal del PSOE.
A su llegada a la Sala Ernest Lluch, Sánchez ha sido recibido con aplausos por sus diputados y senadores, un gesto que han extendido posteriormente a Lastra como muestra de reconocimiento por su labor al frente de la Portavocía del PSOE en la Cámara Baja.
Entre los diputados se ha podido ver a Calvo y Ábalos, tras su marcha del Consejo de Ministros el pasado julio en el marco de la amplia remodelación que llevó a cabo Sánchez para afrontar la segunda parte de la legislatura.
A disposición del grupo
Y ha sido Ábalos el que ha copado la atención de los periodistas, que le han preguntado por cómo estaba y por el papel que ahora jugaría en el Congreso. El exministro ha dicho que estaba "bien" y se ha puesto a disposición de lo que le diga la dirección del Grupo Socialista.
Calvo y Ábalos son los dos únicos ministros cesados que pueden refugiarse en su escaño en la Cámara Baja. La primera consiguió escaño en las últimas elecciones generales de 2019, en las que fue de 'número dos' en la lista del PSOE por Madrid, justo después del propio Sánchez, y el segundo fue cabeza de lista por Valencia.
Está por ver si, como suelen ocurrir con otros exmiembros del Gobierno, la nueva dirección del PSOE en el Congreso decide premiar a ambos con una Presidencia de comisión en caso de que decidan mantener sus escaños y no optar por otra salida.