La política municipal madrileña vive momentos convulsos. Y todo por la escisión de cuatro ediles díscolos de Más Madrid para conformar un grupo mixto en el Ayuntamiento. Gracias a ellos, el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, pudo aprobar su reciente ordenanza de movilidad que sustituye al Madrid Central de Manuela Carmena, algo que ha enfadado a Vox, hasta ahora socio prioritario de la coalición consistorial entre Partido Popular y Ciudadanos, justo en las vísperas de la aprobación de los Presupuestos.
Los ex concejales de Más Madrid aprovechan ahora las desavenencias entre PP y el partido a su derecha para "tender la mano" al alcalde madrileño y así "sacarle de las garras de Vox". Además, muestran su "predisposición" a llegar a acuerdos en las próximas cuentas, arguyendo que "el Ayuntamiento apenas tiene competencias en materia fiscal", lo que facilitaría un pacto económico "en medidas puntuales".
Así lo sostiene José Manuel Calvo, edil del recién conformado Recupera Madrid y exconcejal de Urbanismo en el gobierno de Carmena, en conversación con EL ESPAÑOL: "Hemos conseguido que Vox fuera irrelevante en la votación de la nueva ordenanza de movilidad. ¿No es justo eso lo que quería esa izquierda que tanto habla de 'cordones sanitarios' y que ahora nos llama traidores?".
José Manuel Calvo, ahora concejal de Recupera Madrid, junto a Rita Maestre.
El ofrecimiento de Calvo, sin embargo, no parece que vaya a cambiar los planes del alcalde madrileño. Su entorno es tajante cuando este medio le consulta al respecto: "Nuestro socio prioritario sigue siendo Vox".
Y es que además de que "el entendimiento con los ex concejales de Más Madrid es imposible" en cuestiones fiscales, desmintiendo a Calvo, estas mismas fuentes dicen que existe "mucha satisfacción" con las cuentas aprobadas el pasado curso con la formación de derecha dura, a quien seguirán buscando en lo sucesivo.
'Carmeida'
La única complicación para el entendimiento entre las formaciones de derecha puede ser la campaña hostil que la formación que dirige Ortega Smith en el consistorio madrileño ha emprendido contra Carmeida [un juego de palabras con el alcalde y la exregidora de Más Madrid, Manuela Carmena] tras la aprobación de la nueva ordenanza de movilidad.
Fuentes de Vox en el municipio madrileño aseveran que en adelante pondrán las cosas "más difíciles" en las negociaciones a un alcalde que "no tiene palabra" tras haber incumplido su promesa de acabar con Madrid Central que hizo en la campaña previa a las elecciones municipales de 2019.
Desde el equipo de Almeida, sin embargo, quitan hierro al asunto y aseguran que Vox sigue siendo "el socio prioritario", por cuanto entienden que el enfado forma parte del "juego electoral", tal y como dejó entrever el propio Ortega Smith este pasado lunes en el pleno del Ayuntamiento: "Nos veremos en las próximas elecciones".
Pero antes de los próximos comicios habrán de verse para negociar las nuevas cuentas que el Ayuntamiento ha de aprobar antes de fin de año. PP, Ciudadanos y Vox no habrían de tener excesivas dificultades para llegar entonces a un acuerdo para "bajar los impuestos a los madrileños", según zanjan fuentes del consistorio.