Miriam Nogueras, portavoz de Junts per Catalunya en el Congreso, ha dicho desde su escaño en el Parlamento que España es un "putiferio". Lo ha puesto también en boca de "periodistas italianos y españoles" y lo ha respaldado refiriéndose a la detención en Cerdeña del líder de su partido, Carles Puigdemont.
Ante los aspavientos que ha generado su exabrupto en gran parte de la bancada, Nogueras ha dibujado así el "putiferio" que a su juicio es España: un país donde "se pincha los móviles" a los políticos independentistas; y se "pega, encarcela y manda al exilio" a quienes les votan.
Como guinda, ha diagnosticado que el país sufre "un golpe de estado togado"; es decir: una sublevación a manos de la Justicia, que abandera el "fascismo" y ha logrado "rendir" al Gobierno.
La presidenta de la Cámara, Meritxell Batet, no ha interrumpido a Nogueras, pero sí la ha reprendido cuando ha concluido su intervención: le ha pedido "decoro" y ha recordado el llamamiento al 'juego limpio' que hizo ayer tras los insultos proferidos por diputados en los últimos días.
El "putiferio" enarbolado por Nogueras ha sido en conversación con Pedro Sánchez, que le ha contestado con una "anécdota personal". El presidente del Gobierno, tras exhibir su "afición por el baloncesto", se ha referido a los jugadores de la NBA que no creen en las vacunas. En concreto, a una "estrella" que se niega a inmunizarse por creer que se trata de una "conspiración satánica".
Ha utilizado ese ejemplo inverosímil para retratar lo surrealista de la intervención de Nogueras: "No se cree ni usted misma lo que está diciendo (...) Se me hace difícil responderle".
La parlamentaria separatista ha acusado al Gobierno de "haberse esforzado en hacernos creer que los independentistas éramos el terror de una España ejemplar". Pero eso –ha venido a decir Nogueras– ya no cuela: "La cacería, detención y puesta en libertad de Puigdemont lo ha cambiado todo".
Los jueces "fascistas" han echado un "pulso" a Moncloa: "Ellos son los que deciden, no ustedes. El prestigio de España y la confianza de los socios europeos penden de un hilo". Se trata de un... "golpe togado".
Nogueras también ha desatado el descontento de Gabriel Rufián, que negaba con la cabeza mientras la escuchaba. Pero no por lo de "putiferio", sino por las estocadas de la diputada de Puigdemont a la mesa de diálogo entre el Gobierno central y Esquerra Republicana.
"Han elegido un diálogo ficticio como solución. Siguen utilizando Cataluña para rascar votos a la derecha. Pero es sólo una cortina de humo. Esa mesa no es la solución a la represión, el expolio y el bullying que sufre el pueblo de Cataluña", ha concluido.