Ayuso reconsidera su purga en el Gobierno y en el PP de Madrid: "Feijóo le ha ayudado a relajarse"
Cuando la presidenta madrileña lidere el partido en la región acometerá una reforma importante, pero no tan cuantiosa como la concebida inicialmente.
6 mayo, 2022 03:10Noticias relacionadas
Isabel Díaz Ayuso anda, admiten desde su entorno, "más relajada" desde que Alberto Núñez Feijóo es el nuevo líder del Partido Popular, y desde que la polémica por el contrato de su hermano parece agotarse jurídica y políticamente. Tanto que ya ha aparcado la idea de abordar una importante remodelación para su Gobierno y para su partido en la región, que presidirá a partir del 21 de mayo.
La presidenta madrileña, recordemos, se propuso renovar su equipo "desde los cimientos" tras su guerra fraticida con Pablo Casado y Teodoro García Egea, poniendo en la picota a importantes consejeros de Puerta del Sol que, a su juicio, no la habían defendido lo suficiente en los momentos más duros para ella: Enrique López (Justicia), Carlos Izquierdo (Administración Local y Digitalización) y David Pérez (Transportes). También se abrió a reformar su grupo parlamentario.
Pero las aguas se han calmado y vienen menos revueltas en el seno del PP, tanto a nivel nacional como a nivel regional, en especial gracias al nuevo liderazgo de Feijóo —que ha pactado con su baronesa darle total "libertad" para llevar agenda y discurso propios— y a las encuestas, muy positivas, que demuestran que los madrileños, incluso tras estas semanas convulsas, no han perdido la fe en su dirigente. Todo esto "le ha ayudado a relajarse", según confiesa una fuente cercana a Díaz Ayuso.
Habrá cambios, eso sí, pero no tan importantes ni tan numerosos como previsiblemente había ideado la presidenta madrileña. "Casadistas hemos sido todos, es lo suyo", deslizó esta semana en un desayuno informativo, dando a entender que no cribaría a los miembros de su partido por mayor o menor afinidad a su ex líder —con quien no se habla desde hace meses—... pero remató con un aviso: "Cosa distinta es quien haya puesto en tela de juicio la honorabilidad de mi gobierno y su gestión".
Eso sí lo tendrá en cuenta Ayuso, cuyas palabras han desatado la inquietud en algunos y las quinielas en otros. Todo apunta, según ha podido saber EL ESPAÑOL, a que uno de los absueltos será el propio Enrique López, que arropó a la presidenta en el acto que mantuvo en Fuenlabrada con motivo del aniversario de su victoria electoral.
El encargado de Justicia mantuvo una neutralidad durante la pugna entre Casado y Ayuso que molestó a esta última. Y es que Enrique López se negó a comparecer ante los medios junto a Javier Fernández-Lasquetty y Enrique Ossorio para explicar la polémica en torno al contrato sanitario de Tomás Díaz Ayuso. Pero hay que recordar que el magistrado en excedencia sigue siendo muy valorado en Puerta del Sol, máxime con tantos frentes judiciales abiertos en estos momentos.
Quienes no las tienen todas consigo son Carlos Izquierdo y David Pérez. Si estos pierden sus consejerías en una futura reestructuración (que jamás se produciría antes del paso por las urnas, en 2023), sus respectivos números dos, José Antonio Sánchez y Carlos Díaz-Pache, podrían ascender. Ambos son de la confianza y del gusto de Ayuso, que los colocó para vigilar y atar en corto a los consejeros del llamado cupo Génova (esto es, hombres impuestos en su día por Pablo Casado y su equipo).
En cuanto a la estructura orgánica del partido, hay otro cambio que está cantado. Y es la sustución de Ana Camins como secretaria general del partido en la región por Alfonso Serrano, portavoz parlamentario y mano derecha de la presidenta. Camins ejerció durante toda la pugna interna de portavoz oficiosa de Génova. Y Ayuso no perdona: "No voy a olvidar que se haya intentado trasladar algo distinto [a la honradez de su Ejecutivo, abundando en las palabras antes recogidas]".
Junto a Camins hay otros diputados, ubicados en un segundo plano, que apenas tienen vinculación con el PP de Madrid, y cuya presencia responde al cupo que Génova impuso en las pasadas elecciones autonómicas. Ahí están Alicia Sánchez-Camacho (ex líder en Cataluña) y Mari Mar Blanco, hermana de Miguel Ángel Blanco, secuestrado y asesinado por ETA y presidenta de la fundación que honra su memoria. Sería raro volver a verlas en las listas autonómicas de 2023.
El "nuevo" PP de Ayuso
Esta última semana Isabel Díaz Ayuso se ha dedicado a regalarnos ciertas pistas sobre cómo será el futuro Partido Popular de la Comunidad de Madrid. Y no ha sido precisamente parca en detalles. A las declaraciones apuntando a una criba de los desleales, se suman otras pidiendo guerrilleros para un partido "callejero y pandillero" que recorra la calle y se haga fuerte en el Cinturón Rojo madrileño.
Un perfil que ejemplifica todo esto puede ser el de Noelia Núñez, joven y combativa candidata a la alcaldía de Fuenlabrada, que también es portavoz adjunta en la Cámara de Vallecas. Ella vendría a demostrar esa apuesta decidida de Ayuso por la conquista de los principales ayuntamientos de la izquierda, entre los cuales también están Parla, Alcalá de Henares, Getafe, Alcorcón.... e incluso Rivas-Vaciamadrid, histórico bastión de IU.
Para tamaña empresa, la futura baronesa popular advirtió a sus soldados, en el arranque de su campaña hacia el Congreso que la investirá como presidenta del PP de Madrid, de que quiere "un partido callejero, pandillero, que está con la gente, que da esas peleas y que lo hace siempre con cabeza, con corazón y con humildad".
A nivel organizativo, también ha adelantado que su idea es crear una estructura pequeña, sin concentraciones de poder y disociando su Gobierno del PP de Madrid —frente al modelo mimético en este sentido de Esperanza Aguirre, su referente en otras cuestiones— para que "todo el mundo esté centrado en su responsabilidad".