La vicepresidenta segunda del Gobierno, Yolanda Díaz, está cada vez más lejos de acercar posturas con su supuesta socia y líder de Podemos, Ione Belarra. Aunque la foto de las dos ministras va a ser lo más codiciado de la campaña electoral de Andalucía, las distancias entre ellas parecen insalvables.
Ha sido la futura celebración de la cumbre de la OTAN a finales de junio en Madrid la que ha terminado de enconar la relación. La posición contrataría a la Alianza Atlántica que parecía unir a Yolanda Díaz y a Ione Belarra se ha desvanecido este martes.
El pasado lunes, el portavoz de Podemos Javier Sánchez Serna acusaba al Gobierno de haber "adjudicado a dedo" 37 millones de euros empleados para celebrar el evento en la capital.
Con esas declaraciones tachaba de "ilegal" un contrato que se había aprobado en el Consejo de Ministros del que forman parte tanto los ministros del PSOE como los de Unidas Podemos.
"Este contrato fue aprobado en términos de legalidad en un Consejo de Ministros y el expediente está a disposición de la sociedad española. Cumple con todos los requisitos de legalidad", ha insistido este martes la vicepresidenta segunda durante el transcurso de la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
La respuesta la podía haber dado la ministra portavoz, la socialista Isabel Rodríguez, que también estaba en la sala, pero fue Yolanda Díaz la que desmintió al portavoz de Podemos.
El rechazo frontal a las acusaciones de los de Ione Belarra se ha acrecentado con una postura casi caricaturesca por parte de Díaz y Garzón. "No somos miembros de Podemos", repetían como si casi no conocieran de qué formación política les estaban hablando.
Por otra parte, cuando a Garzón y a Díaz se les ha preguntado por la posibilidad el presidente del Gobierno les convoque a participar en algunos de los eventos celebrados en torno a la OTAN, ambos se han remitido a la necesidad de esperar conocer" sus "agendas".
Sus respuestas quedan abiertas a la interpretación. Particularmente la de Garzón que, tras reconocer la "postura histórica" de Izquierda Unida en contra de la OTAN, ha recordado su "compromiso absoluto e inquebrantable con el acuerdo de Gobierno".
De hecho, al finalizar la rueda de prensa, Yolanda Díaz ha hecho alarde de su condición de "familia de militar" y "vicepresidenta del Gobierno" para dejar entrever una postura favorable a acudir a la cumbre de finales de junio.
Elecciones andaluzas
Mientras Podemos y Yolanda Díaz marcan posiciones distintas frente a la OTAN, el ala socialista de la Moncloa no puede negar que las críticas suponen un problema.
Durante las últimas semanas, Moncloa está usando los "importantes eventos internacionales del presidente" para poner en valor su gestión. Un presidente "internacional" al que no le conviene que dentro de su propio Gobierno cuestionen la celebración de la cumbre de la OTAN.
Las declaraciones de este martes enturbian también el intento de Unidas Podemos de trasladar una imagen de unidad en las elecciones andaluzas. La vicepresidenta lleva más de medio año sin acudir a actos con Ione Belarra e Irene Montero y se pretendía que, con motivo del 19-J, se las volviera a ver juntas.
Concretamente, Díaz tiene un evento con las dos dirigentes de Podemos en Dos Hermanas, Sevilla, el 14 de junio. A esta cita acudirá Alberto Garzón, que parece cada día más cerca de la vicepresidenta.
La decisión del líder de Izquierda Unida parece estar condicionada por la polémica que dejaron las negociaciones de la colación de izquierdas Por Andalucía, en la que se quedaron fuera de la inscripción oficial Podemos y Alianza Verde
Yolanda Díaz fue de las principales valedoras de la candidata de Izquierda Unida, Inma Nieto, que fue designada cabeza de lista. Los morados, en cambio, apostaban por Juan Antonio Delgado, diputado por Cádiz y guardia civil de profesión. El de Podemos, Pablo Iglesias, se mostró partidario de su candidatura.