El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha acusado a "la derecha política" de ser "una terminal de una serie de intereses oscuros, ocultos", motivo por el que, según Sánchez, el PP se opone al nuevo impuesto a las eléctricas o a la subida del salario mínimo interprofesional. A su juicio, "es evidente que está representando no a una mayoría sino a una minoría poderosa que no está de acuerdo con estas decisiones".
Para Sánchez, "lo que quiere la derecha política es volver a un viejo orden que había antes de 2018 -año de la moción de censura-, cuando entre tres o cuatro se repartían todo". Y como hizo el pasado sábado en su intervención tras el Consejo de Ministros extraordinario, se ha quejado de la labor de "terminales mediáticas" que asegura trabajan para esos intereses.
[Sánchez rentabiliza la cumbre de la OTAN con una intensa gira a través de "terminales mediáticas"]
"Es importante que la ciudadanía progresista sea consciente de esta realidad, y de que la afrontamos con la actitud de decir que no nos van a quebrar", ha defendido en una entrevista en la Cadena SER, posterior a la publicada este lunes por La Vanguardia y previa a las que concederá a laSexta, TVE y El País, en las que la cumbre de la OTAN de Madrid será el tema principal, pero no el más controvertido, que a esta hora es Melilla.
Tragedia en Melilla
Sobre esto, Sánchez, interrogado por Àngels Barceló, ha pedido "ponerse en la piel y en los zapatos de las fuerzas de seguridad" a la hora de abordar la tragedia el pasado viernes en la valla, donde murieron decenas de migrantes, si bien ha reculado en su "bien resuelto", las palabras con las que horas después zanjó una pregunta sobre la actuación de los cuerpos encargados de proteger la frontera: "Yo conocí las imágenes después de hacer esa declaración", se ha excusado.
"Sobre los sentimientos no se puede razonar -ha continuado-, pero para evitar tragedias como la de Nador lo que tenemos que hacer es trabajar en Sudán, que es de donde procedían muchos de los migrantes. (...) Lo que hemos visto es solo el último acto de un drama que empieza mucho antes".
Sánchez ha recalcado que estas personas llevaron a cabo "un asalto de manera violenta" y que "siendo empáticos" con sus motivos para huir de sus países de origen hay que entender también "el derecho de nuestros compatriotas en Ceuta y Melilla a tener sus fronteras seguras".
"Entiendo que quieran saltar la valla en busca de un futuro mejor, pero el deber del Gobierno es salvaguardar su integridad territorial", ha sostenido el presidente. Sobre si debería investigarse el suceso, como pide Podemos, ha recordado que ya hay tres procesos en marcha: de la fiscalía de Nador, de la Fiscalía General del Estado y del Defensor del Pueblo.
Instado a condenar a los agentes "que se extralimitaron" -palabras de Barceló-, Sánchez ha evitado hacerlo, insistiendo en esta idea: "Tenemos que ponernos en la piel de todos".
Cumbre de la OTAN
En relación con la cumbre de la OTAN, Sánchez se ha mostrado pletórico por una cita que ya se ha apuntado su primer logro, como lo es la retirada del veto de Turquía para que Suecia y Finlandia puedan adherirse a la alianza. "España se ha convertido en el centro de la política internacional y está dando una imagen extraordinaria", ha afirmado.
[Pedro Sánchez recupera la confianza de EEUU dos décadas después de la retirada unilateral de Irak]
El entusiasmo del presidente solo se ha moderado para referirse al PP, preguntado por si teme que no respalde materializar los acuerdos alcanzados con Estados Unidos este martes. La oposición, ha lamentado, tiene "distinta cara pero la misma cruz". También lo ha hecho al hablar de las fromaciones "a la izquierda del PSOE", que cree que "tienen que hacer la reflexión" acerca de la conveniencia de "aumentar nuestra capacidad de disuasión", es decir el gasto en Defensa.
Sánchez ha desvelado por último algunos detalles de su reunión en Moncloa con el "afable" presidente de Estados Unidos, Joe Biden, como que compartieron su preocupación por la reciente sentencia del Tribunal Supremo que deroga el derecho al aborto y "cómo cuestan tanto las conquistas y en un suspiro, por una mayoría ultraconservadora, se puede poner en solfa este derecho de las mujeres".