El eurodiputado José Ramón Bauzá, vocal de la Comisión de Asuntos Exteriores en el Parlamento Europeo, farmacéutico de profesión y reservista de las Fuerzas Armadas, ha viajado en misión humanitaria a Ucrania, en plena ofensiva para recuperar territorios del este. EL ESPAÑOL ha podido entrevistar en vídeo al portavoz de Exteriores de Renew en el Parlamento Europeo desde el mismo frente de la guerra.
Bauzá viajó a Ucrania el pasado jueves y, si todo va bien, regresará este lunes a Bruselas, donde reside habitualmente. El eurodiputado y expresidente autonómico de Baleares repara en que los mandos militares que ha conocido en estos días en el frente le han preguntado "por los tanques Leopard que prometió el Gobierno de Pedro Sánchez... los estaban esperando en esta ofensiva, y siguen en España".
Meses antes, en la Eurocámara, según explica, tuvo oportunidad de hablar con Oleksii Reznikov, ministro de Defensa de Kiev, "a quien pedí perdón porque mi país, España, había sido el último en aportar material militar y ayuda económica".
"Hemos traído medicinas y torniquetes, porque es lo imprescindible en la primera línea de fuego... además de sacos de dormir y botas de campaña. Los soldados ucranianos llevan semanas bajo la lluvia y las autoridades militares del Gobierno de Volodímir Zelenski nos pidieron específicamente ese material y el tipo concreto de vehículos que dejamos en nuestro recorrido" por el este del país.
Sin dar más datos que pongan en riesgo la misión, durante la conexión por videollamada, el eurodiputado liberal explica cómo -junto a un grupo de colegas, algunos también reservistas del Ejército español- ha participado en la entrega de estos transportes, material sanitario y militar de primera necesidad para los combatientes "en los territorios recién liberados" de la ocupación rusa en las últimas semanas.
"¡Vamos a ganar la guerra! Ucrania la va a ganar, ya la está ganando sobre el terreno... y estaremos a su lado", vaticina Bauzá desde el frente de batalla. "Por seguridad, no podemos decir dónde estamos, ya lo comunicaremos a la vuelta, y explicaremos con detalles la misión".
Entre los suministros, también se han entregado cargamentos de alimentación para bebés y otros bienes de primera necesidad "para las familias que han perdido todo en estas regiones bombardeadas, y saqueadas". Bauzá proclama su "admiración profunda" por la resistencia del pueblo ucraniano, "que mantiene en pie la fina línea que separa a un dictador asesino como Vladímir Putin de las democracias y las libertades".
¿Cuál es la misión concreta que le ha llevado a Ucrania?
Es una misión humanitaria. Vamos a dejar material de primera necesidad y vehículos para el Ejército, de un tipo muy específico que ya explicaremos a la vuelta, para no dar pistas al enemigo. Estos transportes van cargados de medicamentos, material básico y alimentación infantil.
Además, ropa de abrigo y material para los soldados, como sacos de dormir y botas... los combatientes llevan muchas semanas bajo la lluvia y el agua les traspasa las que están usando. También traemos torniquetes, porque esto es la primera línea de ayuda en el frente. Cada vehículo con su carga en primera línea, porque no llega nadie y alguien tiene que hacerlo.
Usted no sólo es eurodiputado, miembro de la Comisión de Exteriores, sino farmacéutico de profesión. ¿Ha influido en algo esa condición?
Obviamente, ¡al cien por cien! Porque se trata de ayudar a personas que dan la vida por nosotros. Son patriotas ucranianos y europeos. Este país es la línea de frontera que separa a un dictador asesino de los demócratas. Es una línea tan simple y tan fina que si Ucrania desaparece, directamente tendríamos enfrente a Putin.
Como servidor público, siempre lo he llevado en la sangre, pero para mí es un honor y un privilegio estar en esta primera línea de batalla.
Además, es usted reservista del Ejército. Puede que los lectores no sepan qué significa eso...
Los reservistas somos personas con diferentes profesiones que, voluntariamente, ofrecemos a las Fuerzas Armadas, a la patria, una parte de nuestro tiempo. Yo soy oficial, alférez... cuando estás activado, tienes responsabilidad y deber de acatar la disciplina militar. El resto del tiempo, eres civil. Aquí no hemos venido activados, que quede claro, sino que voluntariamente nos hemos organizado para cumplimentar una misión organizada con las autoridades ucranianas.
Somos varios los reservistas en este viaje, pero estamos al servicio de la autoridad militar y civil ucraniana.
¿En qué medida le acerca ese compromiso con las Fuerzas Armadas a lo que estás pudiendo ver en el frente de batalla?
Estamos directamente, día a día, con el ejército ucraniano y con las autoridades civiles. Ver de primera mano las necesidades es absolutamente diferente de verlo desde un despacho. Ves a los vecinos, lo que siente, los sufren y padecen, y lo que necesitan. Te das cuenta realmente de lo importante que es la ayuda internacional y lo agradecidos que están con lo que tú hagas. Te reciben con los brazos abiertos y te dan lo que no tienen. El agradecimiento es nuestro a ellos, no al revés.
La ofensiva ucraniana no deja de obtener victorias. Este mismo fin de semana, los rusos han huido de Limán, que está en los territorios teóricamente anexionados por Putin. ¿Se puede ganar la guerra en el campo de batalla?
La está ganando Ucrania. Y el pueblo ucraniano, con Zelenski a la cabeza. Ya dijimos en su momento que a Putin no le habían salido las cosas como imaginaba. Primero, no contaba con enfrentarse a un líder tan carismático y a todo un pueblo. Segundo, tampoco se esperaba una Unión Europea tan firme, con las sanciones frente a él. Algo que no pasó en 2014 con la ocupación de Crimea. Y tercero, el ejército ruso se ha demostrado que no es tan poderoso como se creía.
Se puede ganar y la va a ganar Ucrania, con la ayuda de la UE y del resto de la comunidad internacional.
Para terminar, y sin vaticinios, pero como legislador europeo: ¿Basta lo que estamos haciendo como socios de la UE y aliados de la OTAN, o España debería aportar más?
Yo fui el primero que le pedí disculpas al ministro de Defensa de Ucrania, en la primera reunión que tuvimos en la Comisión de Asuntos Exteriores del Parlamento Europeo... le dije que lamentaba mucho la vergüenza de que el Gobierno de España fue el último en aportar armas y ayuda económica, y de que el socio de Gobierno de Pedro Sánchez, los comunistas de Podemos, hubieran votado en contra de las ayudas por más de 3.000 millones a los ucranianos.
Aquí, además, lo que estamos haciendo es pedir disculpas por los carros de combate que España se comprometió a enviar. Estaban siendo esperados aquí esos Leopard, y los mandos ucranianos nos lo han dicho... pero están en España. Otros países sí han aportado lo que se comprometieron.
Hace falta más, pues...
El Gobierno de España sí ayuda, pero lo justo y necesario para que los comunistas no le quiten el asiento a Sánchez. Hace lo que le permiten, lo mínimo y necesario para seguir... pero no lidera las actuaciones, estamos yendo a la cola. Nos lo preguntan... "¿Dónde están los Leopard?".
Pero vamos a ganar la guerra. ¡La van a ganar los ucranianos! Y estaremos a su lado. Es para hacerles un monumento, visto cómo subsisten, cómo sufren. Debemos darles las gracias por lo que hacen por su pueblo y por todos nosotros. ¿Parece un país que está lejos? Son la primera línea de defensa entre un criminal y los que defendemos la libertad. ¡Un criminal de guerra!... que ya sabemos que puede ser juzgado por crímenes de lesa humanidad.