El Gobierno de España no ha cumplido un segundo plazo dado por la Comisión Europea para cumplir con uno de los hitos del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR). Y es precisamente el más importante para la credibilidad de todo el complejo sistema armado por Moncloa, Economía y Hacienda para la recepción de los 140.000 millones que le corresponden a España en los fondos NextGeneration EU.
De este punto depende todo el volcado de datos y la auditoría de la gestión de los fondos.
Según ha podido confirmar este periódico en fuentes europeas, Bruselas no recibió al cierre de septiembre la información relativa al punto C11.I5 que, bajo el título Transformación de la Administración para la Ejecución del PRTR se ocupa de "poner en marcha los elementos imprescindibles para un correcto funcionamiento del Plan e incluye tanto acciones de carácter organizativo como formativas y de comunicación".
El componente debió de haber estado completado al cierre de 2021, pero España pidió un aplazamiento, dada la "complejidad" de su implementación. Y la Comisión le concedió nueve meses más, que expiraron en septiembre, sin que el Ejecutivo enviara la documentación.
Advertencias de la Comisión
El pasado mes de septiembre, funcionarios de la Comisión advirtieron en Madrid al Ejecutivo de este nuevo retraso.
En todo caso, un portavoz de Bruselas salía al paso de una información de Bloomberg que, en la tarde de este viernes, sugería el bloqueo de los fondos: "Cualquier alegación en ese sentido es infundada", aseguraba.
Y aclaraba que "España ha cumplido satisfactoriamente". Aunque elige un lenguaje muy preciso para explicitar que se han cumplido "todos los hitos y objetivos vinculados a las solicitudes de pago presentadas hasta la fecha".
La Comisión confirma la ampliación de plazo y aclara que la solicitud para el tercer desembolso, de hecho, aún no ha sido enviada desde el Gobierno español. Con respecto a lo primero, detalla que "ésta no es una práctica inusual, ya que otros Estados miembros han contraído compromisos similares [que] sólo se evalúan en el momento de las solicitudes de pago correspondientes".
Con respecto a lo segundo, advierte: "La Comisión llevará a cabo una revisión de la implementación de estos compromisos por parte de España cuando evalúe la próxima solicitud de tercer pago del país". Una advertencia velada a España, a la vista del retraso constatado.
Fuentes del Ministerio de Hacienda admiten que "se sigue trabajando" para satisfacer el compromiso con Bruselas, que "es quien decide si se cumple o no". Según un portavoz del departamento de María Jesús Montero, "el diálogo con las autoridades europeas es fluido y constante y la Comisión Europea es conocedora de que España está trabajando en las mejoras de los sistemas de información".
A pesar de este nuevo incumplimiento, las fuentes consultadas en la Comisión y el Parlamento Europeo dan por hecho que el tercer desembolso de los fondos, previsto para diciembre, no está en peligro.
Pero sí lo estaría el cuarto, de continuar España sin cerrar este hito, algo que fuentes parlamentarias consideran "un riesgo posible, dada la profundidad de las reformas comprometidas". Y eso que le puede hacer mucho daño electoralmente a los partidos del Gobierno.
Otro alto cargo implicado en los sistemas de control y evaluación de los fondos europeos recuerda que "la Comisión quiere el sistema de control que España incluyó en el PRTR y que ahora es incompatible con el modelo administrativo, lo que es muy difícil de solucionar".
¿Dónde está el dinero?
En ese sentido, fuentes europeas ponen en duda "la credibilidad de todo el plan español" si no se aborda este componente con urgencia, dada "la opacidad" con que las comunicaciones del Ejecutivo dan cuenta del avance en el desarrollo del PRTR.
"En Bruselas, tememos que el dinero no está llegando al tejido productivo", explica un alto funcionario implicado en la negociación institucional. "Se desembolsan miles de millones desde la Comisión, tras las evaluaciones, el Gobierno hace convocatorias... y sin embargo, las empresas y los autónomos nos dicen que no reciben la financiación", añade la eurodiputada Eva Poptcheva.
El problema es que este hito concreto es el que serviría para "seguir la trazabilidad de los fondos", aclara. Pero se trata de una transformación a fondo en "toda la Administración General del Estado y en el resto de Administraciones Públicas", como explica el mismo Plan de Recuperación español.
Es decir, que el Gobierno está comprometido con la UE a una revolución administrativa también de las Comunidades Autónomas y de las entidades locales en "su forma de funcionamiento y organización" que se considera "imprescindible para un correcto funcionamiento del Plan".
Y lo cierto es que la llamada Plataforma de control "sigue sin estar en marcha, en un fracaso flagrante", apunta otra fuente implicada en el control de los fondos. "Y es necesaria para contrastar cumplimiento de inversiones y contribución al cumplimiento de los hitos y objetivos".