La tragedia de Melilla no es "tragedia" para unos ni es "de Melilla" para los otros. Pero el problema es que en esas dicotomías el ministro del Interior se ha quedado solo. A Fernando Grande-Marlaska ya sólo le apoya el presidente. Y por disciplina, claro, los ministros del PSOE que se dejan preguntar por el asunto. Pero PP a un lado y Podemos al otro, a pesar de las distancias insalvables, son el núcleo de los unos, ésos que quieren ver caer al titular de Interior.
Los morados -junto a ERC, PNV, Bildu, Junts, PDeCAT, Más País, Compromís, BNG y la CUP- han pedido ya una comisión de investigación parlamentaria [consulte el documento en PDF]. Los populares, por su parte, exigen que acuda al Congreso a dar explicaciones [consulte el documento en PDF].
Y fuentes del grupo parlamentario del PP recuerdan que no lo ha hecho desde hace año y medio, y que ha desatendido más de 30 requerimientos de la oposición para ello.
Ambos lados del hemiciclo acusan a Marlaska de "mentiroso" tras haber asegurado que "todo ocurrió en territorio soberano de otro país", dado que consideran "probado" que eso no es cierto.
Pero mientras los de Alberto Núñez Feijóo descartan votar a favor de la investigación solicitada por Unidas Podemos, lo que no descartan es presentar la suya propia. Y a la vista de la argumentación de los populares, el socio minoritario del Gobierno no ve inconveniente en apoyar esta exigencia del PP para que Marlaska se vea obligado a dar explicaciones a la Cámara.
El escrito del Partido Popular que exige la comparecencia en pleno no tiene nada que puedan rechazar, según explican fuente de los morados. Y aunque el acuerdo de coalición con el PSOE impide que se fuercen comparecencias de ministros de la otra formación, "no sería la primera vez que PP y Podemos votan juntos en junta de portavoces".
Señalar a Marruecos
Una fuente de la Comisión de Interior del Congreso, que estuvo presente en la misión que acudió al paso del Barrio Chino en Melilla la semana pasada, sugiere cuál puede ser la explicación de la actitud tan errática del Ejecutivo.
"Fue el primer asalto después de la normalización de relaciones con Marruecos, en la vista de Sánchez al rey Mohamed VI en abril", remarca. Es decir, la primera ocasión en que las fuerzas de Rabat colaboraban de manera activa en más de un año para detener una oleada de migrantes irregulares.
La situación en el puesto fronterizo "era imposible", según explicaron los agentes durante varias horas a los diputados, con cientos de jóvenes en avalancha, "y en una emergencia, lo primero es solucionarla", revela esta fuente que explicó la comandancia. "En esas circunstancias, la única salida política era señalar a Marruecos y a sus fuerzas de seguridad… pero eso era imposible en ese momento, con las relaciones reconstruyéndose".
Cabe recordar que, preguntado por los más de 20 muertos -quizás más de 40, según ONG marroquíes-, el presidente alabó "el trabajo conjunto" de los agentes españoles y marroquíes ante una crisis "bien resuelta". A los dos días, hubo de matizarse a sí mismo: "No había visto las imágenes", alegó Sánchez. Pero nunca dio la espalda a Marlaska ni culpó a Rabat.
Sin fecha para votar
La presidencia del Congreso aún no ha señalado día para la reunión de la junta de portavoces, a pesar de que lo habitual es que el viernes anterior ya se conozca el calendario. Fuentes parlamentarias explican a este diario que la Presidencia de Meritxell Batet ha alegado que la que viene "es semana de Presupuestos". Y que todo ha quedado supeditado a la celebración de las reuniones en comisión para las cuentas públicas de 2023.
Pero lo cierto es que el PSOE es consciente de que, ante la petición del PP de una comparecencia de Marlaska en pleno, tendría la votación perdida. Y maniobra para que el ministro registre cuanto antes una solicitud de comparecencia "a petición propia", según ha confirmado este diario en varias fuentes socialistas.
Desde el entorno de los partidos que sostienen al Gobierno, de hecho, se recuerda que el pacto de coalición prevé que ambas partes "no fuercen" estas situaciones. "Otra cosa es que las permitan". Así, votara o no a favor Unidas Podemos de la comparecencia, otras fuentes del Congreso confirman que, de momento, "hay mayoría para que salga adelante la petición del PP y Marlaska se vea obligado a comparecer en pleno".
El PSOE lo sabe, y urge al ministro, aunque resulte extemporánea una petición de este tipo cinco meses después de los hechos. Más aún cuando la última novedad en el caso ha sido el reportaje de la BBC que Marlaska despreció como "ese programa de televisión", ante una pregunta parlamentaria de Ana Vázquez, portavoz popular de Interior.
Fiscalía y Defensor del Pueblo
El trabajo periodístico de la cadena británica prueba, en media hora de imágenes inéditas, testimonios y gráficos, que sí hubo muertos en suelo español, como ya sospechaba el Defensor del Pueblo.
Pero al trabajo de Ángel Gabilondo, la otra novedad en las últimas semanas, también ha sido minusvalorado por el Gobierno. El mismo presidente aseguró el pasado viernes 4 de noviembre, en rueda de prensa, que "más allá de lo que diga el Defensor del Pueblo, el ministro siempre se ha conducido por el máximo respeto a los derechos humanos".
Ahora queda la Fiscalía, que ya ha pedido continuar la investigación que abrió a los pocos días de los hechos. Y ha puesto en duda, cómo Gabilondo, la colaboración y transparencia del departamento de Marlaska, sugiriendo que faltan algunos minutos de vídeo en las imágenes entregadas. Interior lo rechaza y afirma que ha enviado a ambas instituciones todo el material del que dispone.
Falta que las cintas se vean en el Congreso, eso también lo pide el PP en su requerimiento. Y con los populares, todos los socios del Gobierno: el minoritario de la coalición y los de investidura.
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