“El procés no estará acabado hasta que haya un presidente de la Generalitat de Cataluña que sea no independentista”. Esta es básicamente la tesis de Pedro Sánchez, explicada por uno de los dirigentes socialistas que participa con el presidente del Gobierno en la elaboración y aplicación de la hoja de ruta respecto a Cataluña.
Dentro de esa estrategia, fuentes de Moncloa sitúan decisiones del Gobierno como la reforma del delito de sedición y antes los indultos y la constitución de la mesa de diálogo con Cataluña.
Con todas esas medidas Sánchez busca sobre todo romper la unidad del independentismo y, de esa forma, facilitar que el líder del PSC, Salvador Illa, pueda ser presidente de la Generalitat. Ya fue el partido más votado en las últimas elecciones autonómicas y el objetivo es poder gobernar.
Fuentes socialistas aseguran que no es descartable que pueda haber elecciones en Cataluña antes de las municipales y autonómicas de mayo, o antes de las generales de diciembre. Al menos, el PSC trabaja con esa hipótesis para los próximos meses, lo que alteraría notablemente el calendario electoral y la agenda política de 2023.
Dependerá de las encuestas, de la capacidad de Pere Aragonès para gobernar en minoría y del resultado de las municipales en Cataluña.
Según esta versión, es evidente que ya han conseguido esa división del independentismo. Citan la ruptura de la coalición del Gobierno, que ha dejado sólo y en minoría a Pere Aragonès, la división en los actos de la última Diada y el intercambio de reproches entre los partidos independentistas.
El plan de Moncloa pasa por agudizar esa división y entiende que se está consiguiendo con la mesa de diálogo y ahora con el acuerdo sobre la reforma del delito de sedición. Esa consecuencia explica en parte la decisión de Sánchez, según fuentes de su entorno.
Esos acuerdos, que serán refrendados en un nueva reunión de la mesa con Cataluña antes de final de año, sirven igualmente para asegurar la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado para 2023.
Está pendiente también la aprobación de los Presupuestos en Cataluña, aunque el Gobierno de la Generalitat aún no los ha presentado. Si lo hiciera, los socialistas prevén que Aragonès busque primero apoyos en otros partidos independentistas. El PSC está dispuesto a negociarlos, pero según explicaba Salvador Illa en entrevista en EL ESPAÑOL “va a ser una negociación estrictamente presupuestaria”.
La intención de los socialistas es no ir más allá de ese apoyo puntual.
O gestiona tu suscripción con Google
¿Qué incluye tu suscripción?
- +Acceso limitado a todo el contenido
- +Navega sin publicidad intrusiva
- +La Primera del Domingo
- +Newsletters informativas
- +Revistas Spain media
- +Zona Ñ
- +La Edición
- +Eventos