Bruselas

La reforma del delito de malversación para contentar a Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) amenaza con abrir una nueva brecha en el Gobierno de coalición de Pedro Sánchez. Mientras que el ministro del Interior y juez, Fernando Grande-Marlaska, sostiene que los cambios no rebajarán en ningún caso las penas para los casos de corrupción, la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, se desentiende de la reforma.

Este viernes acaba el plazo previsto en el Congreso para presentar enmiendas a la reforma que deroga la sedición, dada la tramitación urgente impulsada por PSOE y Unidas Podemos. Para mañana se espera por ello que ERC presente sus propuestas para cambiar la definición de la malversación con el fin de rebajar o elimar las penas para los dirigentes del procés.

"Unidas Podemos tiene posición propia. Mañana conocerán las reformas que vamos a formular. Y desde luego sí les digo con rotundidad que Unidas Podemos no está presentando enmiedas que tengan que ver con la malversación", ha dicho Díaz a su llegada a la reunión de ministros de Empleo de la UE que se celebra este jueves en Bruselas.

[ERC presentará "en horas" una enmienda para rebajar la malversación "negociada" con el PSOE]

"Lo que estamos haciendo es trabajar por un país con más derechos, más avanzado democráticamente y desde luego ahí nos van a encontrar y ahí verán cuáles son las enmiendas que formulamos. Pero soy clara: Unidas Podemos no formula enmiendas con un tipo penal conocido como malversación", ha insistido la vicepresidenta segunda.

Por su parte, Grande-Marlaska, que también se encuentra en Bruselas para participar en el Consejo de Interior de la UE, ha pedido también esperar a la presentación de enmiendas, pero da por hecho que habrá una propuesta de ERC para modificar la malversación. No obstante, insiste en que los cambios no provocarán una rebaja de penas para los corruptos.

"Tiene que quedar muy claro que no va a haber ninguna relajación en la lucha contra la corrupcion. Desde luego, la lucha contra la corrupción es una seña de identidad de este Gobierno, lo ha sido siempre del Partido Socialista Obrero Español, con lo cual no tiene que haber ninguna preocupación", ha asegurado el ministro del Interior.

"La máxima dureza y la máxima respuesta también criminal contra cualquier conducta susceptible de ser calificada como corrupción. No hay duda al respecto (...) En modo alguno se va a relajar la respuesta penal hacia cualquier delito de corrupción", sostiene Grande Marlaska.

El juez también descarta que la abolición del delito de sedición deje desarmado al Estado frente a amenazas como el intento de golpe de Estado por parte de la extrema derecha desarticulado este miércoles en Alemania. "No se está rebajando ni se va a rebajar ninguna pena ante delitos graves. No hay ninguna relajación sino todo lo contrario, tenemos el foco bien colocado para hacer frente a la radicalización", ha respondido.

Por otro lado, Grande-Marlaska ha anunciado en Bruselas que está dispuesto a comparecer ante el Parlamento Europeo para dar explicaciones sobre la tragedia en la frontera de Melilla el pasado mes de junio. El comité de Libertades Civiles, Justicia y Asuntos de Interior de la Eurocámara le convocó el pasado mes de julio, pero el ministro no quiso participar. Esta semana le ha vuelto a invitar por segunda vez.

"Este Gobierno es absolutamente transparente, he comparecido desde el primer momento y lo único que puedo decir es algo muy claro: fue una tragedia que a nadie nos hubiera gustado que sucediera, que no debía haber sucedido", ha repetido el ministro del Interior.

"Pero partiendo de este extremo, ningún hecho trágico aconteció en territorio español y la actuación fue un ataque violento de una extremada violencia donde nuestras fuerzas y cuerpos de seguridad del estado (y esencialmente la Guardia Civil a quien le corresponde el control del perímetro) actuaron absolutamente en parámetros de legalidad, proporcionalidad y necesidad", ha zanjado.