Salvador Illa, primer secretario del PSC, lidera la vanguardia en defensa de las últimas y controvertidas decisiones del Gobierno en pro de la "convivencia" con Cataluña y lo hace frente a la oposición, frente al independentismo en su ambición insaciable y frente a sus propios compañeros de partido críticos con esas decisiones. Este jueves, Illa ha retado a ERC en una entrevista en Televisión Española en la que también ha desvelado el contenido de los "mensajes" que en las últimas horas ha intercambiado con el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.
El exministro de Sanidad se puso en contacto con García-Page tras escuchar su 'estallido' del martes, cuando el barón castellano-manchego dijo "soy muy contrario a la decisión del Gobierno", "que nadie piense que la gente es tonta y se olvidará" o "no es tolerable pactar con los delincuentes su propia condena", lo que apuntilló con un "eso sí es hacer historia", un evidente dardo al presidente del Gobierno y secretario general de su partido, Pedro Sánchez.
Illa ha desvelado que sostuvo ante García-Page que "el PSC, como primer partido de Cataluña, garantiza el cumplimiento íntegro de la Constitución". En segundo lugar, le transmitió que "lo que es bueno para Cataluña es bueno para España" y que "hay que tener altura de miras y mirar por el reencuentro". En ese momento, García-Page le respondió con su "opinión", que Illa ha aclarado que es la misma que expresó el martes en público. La conversación transcurrió "de modo respetuoso, de compañero a compañero".
Page, "enormemente acompañado"
La entrevista a Illa en TVE este jueves ha llegado a oídos de García-Page, que se encontraba en Toledo en la presentación de la campaña 'Navidad en compañía. Ningún mayor solo' y no ha perdido la ocasión de contestarle: "La altura que quiero tener es la que me presta mi gente, salir a la calle y mirar a la altura de los ojos a la gente, esa es la altura que se necesita para estar en el mundo de la política".
El presidente castellano-manchego ha deslizado que algunos dirigentes solo ven a los independentistas, pero que si se mira más alto están la propia Castilla-La Mancha, Aragón o la Comunidad de Madrid. Porque lo cierto es que en el PSOE hay más brechas que la de García-Page, como él mismo recuerda. Este miércoles le secundaron, eso sí en un tono más contenido, los líderes socialistas en Aragón, Javier Lambán, y la Comunidad de Madrid, Juan Lobato, o dirigentes claramente 'sanchistas' como el alcalde de Valladolid, Óscar Puente.
Se desconoce si la crisis interna tiene algo que ver con la cena que este miércoles mantuvo el expresidente Felipe González con todos sus ministros en Madrid. En cualquier caso, García-Page ha querido dejar cristalino que no está solo ni en sus propias filas: "Me siento enormemente acompañado aunque a lo mejor seamos muy poquitos los que lo digamos".
Reto a ERC
El Govern no solo no ha moderado su lenguaje tras los indultos a los presos del 'procés', la derogación del delito de sedición y la rebaja del de malversación, sino que en este momento persigue la celebración de un referéndum de autodeterminación y se ha comprometido a ejercer "la máxima fuerza posible ante el Estado". Illa cree que ERC y el ejecutivo que lidera en Cataluña está engañando: "Pido -a ERC- que tenga el coraje de decir la verdad a los ciudadanos, que es que no va a haber un referéndum, entre otras cosas porque los catalanes no lo piden; que se ha pasado página".
El socialista, que ha recalcado que el gobierno que preside Pere Aragonès "es el más débil en muchos años", ha recordado que "la mayoría quiere seguir formando de España", opinado que "estamos mejor que hace cinco años" y asegurado que "la próxima consulta que habrá en Cataluña será cuando se llame a las urnas en las elecciones autonómicas".
Illa no se mueve de su posición. Sí lo hace para tratar de convencer de que Sánchez está acertando y de que no hay que dejarse engañar por el lenguaje del independentismo, que pide más. También ha querido subrayar que "el compromiso de los socialistas contra la corrupción es inequívoco" y que "en ningún caso se despenaliza".