Desde este martes ninguna bandera de la Legión llevará el nombre del dictador Francisco Franco. Así lo ha ordenado la ministra de Defensa, Margarita Robles, que ha firmado una resolución en la que se cambia la denominación de la "Bandera Comandante Franco" de la Legión por el de "Bandera España", en aplicación de la Ley de Memoria Democrática aprobada en octubre por las Cortes Generales.
De esta forma, Robles elimina cualquier tipo de símbolo o palabra que homenajee a Franco en la Legión, de la que el dictador fue su primer jefe. De hecho, Francisco Franco fue quien eligió el dibujo que aparece en la ahora renombrada bandera. Se trata de dos cabezas de jabalí que representan al Tercio Gran Capitán de la Legión de la Comandancia General de Melilla.
Según se publica este martes en el Boletín Oficial del Estado, el Ministerio de Defensa alude al artículo 35 de la nueva Ley de Memoria, que afecta a los "símbolos y elementos contrarios a la memoria democrática".
En concreto, señala como elementos contrarios a la memoria democrática aquellas referencias "a la sublevación militar y de la dictadura, a sus dirigentes, participantes en el sistema represivo o de las organizaciones que sustentaron la dictadura y las unidades civiles o militares de colaboración entre el régimen franquista y las potencias del eje durante la Segunda Guerra Mundial".
Según ha decidido el Ministerio, esto afecta a la hasta ahora llamada "Bandera Comandante Franco" del Tercio Gran Capitán de la Legión, de la Comandancia General de Melilla, que a partir de ahora pasará a llamarse "Bandera España".
Tras la aprobación de la ley de Memoria el pasado mes de octubre, Defensa creó un nuevo organismo para "el estudio, la coordinación y la planificación" de las actuaciones derivadas de ella y presidido por la subsecretaría del Ministerio, Adoración Mateos.
Su función, según su decreto de creación, es la de, coordinar y planificar todas las implicaciones legales que la Ley de Memoria tenga en el ámbito del Ministerio de Defensa, tanto en el ámbito patrimonial como de acceso y consulta a la documentación de sus archivos, así como la tramitación de todos los procedimientos administrativos derivados de la nueva legislación y la colaboración con otras administraciones.
Una ley pactada con Bildu
La Ley de Memoria Democrática impulsada por el Gobierno se aprobó el pasado 5 de octubre, después de que el PSOE y sus socios rechazaran en el Senado los cuatro vetos y 521 enmiendas presentadas por los grupos de la oposición.
La norma pactada por el PSOE con Bildu extenderá hasta finales de 1983 la investigación sobre la vulneración de derechos humanos en la Transición. Fue aprobada por 128 votos a favor, 113 en contra (PP, Vox, Cs y UPN) y 18 abstenciones.