Ni Pedro Sánchez, ni Yolanda Díaz, ni ninguna vicepresidenta o ministro socialista han arropado este martes a la ministra de Igualdad, Irene Montero, durante la toma de consideración sobre la reforma de la ley del sólo sí es sí. Sólo la titular de Derechos Sociales y secretaria general de Podemos, Ione Belarra, se sentó en la bancada azul junto a su compañera durante las casi dos horas de debate.
La sesión del Congreso de los Diputados coincidió con otra de control al Gobierno en el Senado, pero ni el presidente Sánchez ni la vicepresidenta Díaz tenían preguntas programadas ni ningún otro acto en sus agendas. El equipo de la ministra de Trabajo, eso sí, justifica su ausencia con que nunca asiste a tomas de consideración –sí irá a la votación, más tarde– y que estaba pendiente de la Mesa del Estatuto del Becario que se celebraba esta misma tarde, aunque no asistirá.
Tras más de seis meses de reuniones, negociaciones, riñas y desplantes la reforma de la ley del sólo sí es sí comenzará a tramitarse este martes con los votos a favor del PSOE, el PP y Vox. La determinación de los socialistas de impulsar su propio texto a espaldas de Podemos ha provocado una fisura en el seno del Gobierno, dividido por la libertad sexual a apenas 24 horas del 8-M, Día Internacional de la Mujer.
Desde el PSOE también justifican la ausencia de sus ministros con que tampoco suelen asistir a las tomas de consideración. Algunos de ellos, como las vicepresidentas Nadia Calviño y Teresa Ribera, estaban a esa misma hora contestando preguntas en el Senado. También tenían excusa por estar fuera de España Margarita Robles, Carolina Darias y Joan Subirats.
Mientras todo esto ocurría, Ione Belarra (que no suele asistir a estos asuntos) e Irene Montero aguantaron solas el chaparrón desde la bancada azul. A pesar de la ausencia de sus compañeros de filas y las diferentes sensibilidades sobre cómo afrontar la negociación, todo Unidas Podemos –Díaz y Garzón incluidos– votará en bloque 'no' a la iniciativa socialista para reformar el sólo sí es sí.
"Da igual que presentemos una o siete propuestas. El PSOE no va a pactar nada", reprochaba esta tarde una fuente de la dirección morada. La frustración de las ministras moradas era visible desde la tribuna del hemiciclo, con Ione Belarra apretando la mandíbula e Irene Montero al borde de las lágrimas ante los envites de los grupos parlamentarios, incluido el socialista.
Fue precisamente la secretaria de Igualdad del PSOE, Andrea Fernández, la encargada de afear a las ministras su ley estrella. "A quienes intenten jugar a desacreditar la hoja de servicio del Partido Socialista quiero decirles que hacen ustedes el ridículo; lamento decirles que es una estrategia que nadie cree y que nadie comparte", reprochó la diputada directamente hacia la bancada de Podemos.
"Nos gustaría que hablasen ustedes de sus propuestas para mejorar esta ley, estamos cansadas de peroratas, dejen las hipérboles y hablen de soluciones. Cuando se trate de cuestiones con tanta relevancia no importa el con quién sino para quién", increpó en relación a las críticas de sus socios, que echan en cara la alianza táctica del PSOE con la derecha para reformar la ley.
Incluso la portavoz del PP, Cuca Gamarra, que salió a defender la postura de su partido, remarcó la soledad de Montero y Belarra. "¿Dónde está hoy Pedro Sánchez? ¿Dónde está la parte del Gobierno socialista que no está aquí dando la cara? ¿Dónde está la ministra de Justicia?", preguntó desde la tribuna.