El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha vuelto a evitar a Pedro Sánchez. Page, habitualmente crítico con el presidente del Gobierno, finalmente no ha acudido al acto organizado por el PSOE para dar visibilidad a Emilio Sáez, que intentará revalidar el próximo 28-M al frente de la Alcaldía de Albacete, y que ha contado con el líder del Ejecutivo.
Con su ausencia, Page sigue ahondando en su intento de marcar un perfil propio de cara a las elecciones autonómicas y se mantiene como el único barón socialista que no acude a este tipo de actos cuando va Sánchez. Incluso Javier Lambán, presidente de Aragón y también crítico con la línea de Ferraz, acudió cuando Sánchez se trasladó a Zaragoza para un acto idéntico.
Page y Sánchez sí que se vieron horas antes del acto, en una visita a la empresa Skydweller Aero. El castellanomanchego acudió por cortesía y como representante del Gobierno autonómico, pero luego rechazó asistir al mitin de partido. A fin de cuentas, de haber ido habría tenido que hablar y Sánchez y él tendrían que haberse elogiado. El presidente del Gobierno no hizo referencia a Page en ningún momento de su discurso.
[Desaparece todo rastro del logo del PSOE en el "periódico" de precampaña de García-Page]
El presidente autonómico y su equipo están marcando distancias con Sánchez y centrándose en una campaña más de perfil propio. Temen que algunas de las decisiones más polémicas del Ejecutivo -como la rebaja de los delitos de malversación y sedición, por ejemplo- acaben repercutiendo en contra de sus intereses electorales en Castilla-La Mancha.
Esta es una forma de afrontar el ciclo político que cuenta con el respaldo velado de Ferraz -a fin de cuentas entienden que puede ser lo mejor para el partido-, pero que no deja de generar momentos incómodos. Page tampoco acudió al Comité Federal del PSOE que reunió a casi todos los barones y ha estado ausente en otros eventos importantes para Sánchez, como cuando le proclamaron presidente de la Internacional Socialista.
La última acción de Page en esa dirección propia ha ocurrido este mismo fin de semana. El partido ha editado un periódico propagandístico para apoyar las candidaturas del PSOE en Castilla-La Mancha y en ninguna de sus 16 páginas aparece el logo del partido. De puertas para adentro, nadie en el entorno del presidente autonómico escondía que no iba a acudir al acto de este lunes en Albacete.
Único proyecto político
En su discurso, sin mentar a Page, Sánchez ha reivindicado al PSOE como, no sólo "el proyecto político que necesita el país", sino que ha llegado a decir que el suyo es "el único proyecto político que existe en el país". Lo ha dicho en referencia a "las campañas" de la oposición y a "su capacidad de hacer ruido, de no decir nada y solamente insultar".
[Sánchez admira el avión solar de Skydweller en Albacete y lo considera un "logro formidable"]
Sánchez se ha centrado en resaltar los logros llevados a cabo por el Gobierno, que es la estrategia que va a seguir Ferraz para apoyar a sus candidatos en las municipales y autonómicas. El último de esos logros ha sido la reforma de las pensiones y ha acusado al líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo, de "dar una imagen lamentable" cuando acudió a Bruselas a criticar la medida del Ejecutivo.
"Trasladó una imagen de estar siempre a la contra, no del Gobierno de España, sino del interés general", ha asegurado. Ha recordado, además, cuando el PP fue a Europa a criticar la gestión de los fondos europeos y de otras medidas como la llamada solución ibérica.
"Identifican las reformas con recortar. Nosotros las identificamos con dignificar. Dignificar las pensiones, dignificar las condiciones laborales, dignificar los salarios de nuestros trabajadores y trabajadoras", ha subrayado Sánchez.