El exvicepresidente del Gobierno y exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, cree que no lograr una candidatura de unidad bajo el paraguas de Sumar sería un "fracaso" de Yolanda Díaz y del resto de formaciones políticas, incluido Podemos. "Si no hay acuerdo, la gente nos corre a gorrazos", ha advertido.
También ha incidido en la responsabilidad y la "presión enorme" que tiene ahora Yolanda Díaz como líder del espacio progresista y "en la que se le viene encima" tras conocer las exigencias de Compromís para confluir con Sumar que consisten en liderar la lista del partido en la Comunidad Valenciana.
En declaraciones a TV3, Iglesias ha reflexionado que la "unidad" a la izquierda del PSOE es "imprescindible" y que "cualquier otra cosa que no sea conseguirla sería un fracaso de Díaz y su partido (Sumar) y de todos los partidos".
Eso sí, ha dicho que debe "llamar la atención a todo el mundo" el planteamiento de Compromís, que cuestionó que Podemos pidiera una negociación con Sumar, y ahora exige precisamente lo mismo, que tiene que "encabezar" todas las candidaturas en la Comunidad Valenciana y que "no acepta ir con ninguna persona de Podem (la marca de Podemos en Valencia).
"Hay una situación muy compleja en la que parece que, al no haber tiempo para primarias, que no va a poder ser el protagonismo ciudadano quien defina cómo se construye un espacio político ilusionante, sino que ya estamos viendo cómo sale Compromís. Y lógicamente el resto de partidos van a decir, yo también. Si Compromís plantea estas exigencias, yo también quiero", ha ahondado Iglesias.
El 28-M, un "golpe enorme" a Podemos
A su juicio, esta situación debe hacer reflexionar, ante el adelanto de las elecciones generales, sobre "lo importante que hubiera sido tener las cosas listas y preparadas antes", en referencia a la configuración de un frente amplio de izquierdas.
[La parroquia de Podemos no tiene suficientes feligreses]
Ahora, según su análisis, "todo el mundo tiene que hacer un esfuerzo" para la confluencia porque "no hay alternativa", insistiendo en que la presión que debe tener ahora Díaz no se la desea a nadie, porque tiene la misión de "poner de acuerdo a mucha gente" en un plazo corto de tiempo.
Finalmente, ha remarcado que en los comicios del 28-M Podemos ha sufrido un "golpe enorme", con una posición más débil pero resaltando que es un partido de ámbito estatal.
En este punto, ha sentenciado que Izquierda Unida está incluso más debilitada y que el resto de formaciones son de carácter regionalista con "satélites" en otros puntos que no obtienen representación por sí mismos.