El PP, dispuesto a repetir las elecciones en Murcia con López Miras: "Vox antepone los sillones"

Ante esto, fuentes de la dirección nacional del Partido Popular responden: "Vox está demostrando que antepone los sillones a que se produzca un cambio político".

En la Región de Murcia, Génova ya ha asumido que no saldrá adelante la investidura de Fernando López Miras. Porque, a escasas semanas de que se convoque el Pleno, no hay ninguna intención de "ceder a las presiones injustificadas de Vox para formar un gobierno de coalición". Especialmente, cuando el PP se quedó a dos diputados de la mayoría absoluta. "Que voten en contra", apostillan. 

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Caso aparte es Aragón, donde el entendimiento está cada vez más cerca de ver la luz, y Extremadura, donde los dirigentes de la cúpula popular consultados por este periódico reconocen que las circunstancias son diferentes. María Guardiola necesita, sí o sí, el apoyo de Vox. Y el fracaso de su investidura, argumentan, se podría volver en contra porque "sería muy difícil de explicar a los votantes".

"En Murcia, si no hay un gobierno en solitario de López Miras, rápidamente se identificará como culpable a Vox. Eso, en términos políticos para la campaña del 23-J y una hipotética repetición electoral, servirá para apuntalar a los votantes de centro y, también, a los de Vox, que no entenderían esta decisión errónea", es la explicación que ofrecen en la dirección popular. 

A escasas semanas de las generales, la distancia del PP con este partido, en el contexto de Murcia, hasta resultaría favorable para la estrategia política de Alberto Núñez Feijóo. Por un lado, desvía el foco del pacto en la Comunidad Valenciana. Y, por otro, le devuelve al centro político, donde puede recibir votantes a izquierda y derecha. 

Una vez aplacada la polémica de Extremadura, los populares reconocen que han aprendido la lección: "Falló el ruido". En la dirección del partido cierran filas con la candidata, aunque admiten que se excedió en las formas porque, a diferencia de López Miras, ella no se quedó a las puertas de la mayoría absoluta. En ese sentido, recalcan, "hay un problema con el relato". 

Contactos Feijóo-Abascal

Lo que sí tratan de garantizar en la sede de Génova es que de aquí a la celebración de los comicios del 23-J no habrá más sobresaltos con Vox que puedan penalizar durante la campaña. En la Región de Murcia, ya está prevista la investidura de López Miras para la segunda semana de julio.

Hace poco menos de un mes, el entorno del presidente en funciones proclamó: "Si Vox vota en contra, hacemos aquí entera la campaña de Feijóo". A día de hoy, no hay previsión de entendimiento. El PP ha ignorado todos los órdagos lanzados por Vox, que exigen tener al menos una consejería con la que puedan fiscalizar la acción del próximo Gobierno autonómico.

En las últimas semanas, Feijóo y Abascal han mantenido contactos de forma frecuente. Según ha podido saber EL ESPAÑOL, el presidente popular transmitió a su homólogo que discrepaba de la línea de actuación que estaban siguiendo sus dirigentes en aquellos territorios donde el PP ganó con una "mayoría suficiente". En ese sentido, pidió al presidente de Vox que no bloqueara "los gobiernos del cambio". 

Para Génova, resulta inexplicable la postura que han asumido los de Abascal. Y extrapolan la ecuación a lo que podría pasar tras las generales: "Si Feijóo gana y suma más que toda la izquierda, ¿la mejor solución será que siga gobernando Pedro Sánchez?". Porque el PP teoriza con que Vox está demostrando tener interés sólo en la "poltrona" y no en facilitar que los ciudadanos tengan "el cambio que pidieron en las urnas".