El presidente del Gobierno y candidato del PSOE a las próximas elecciones generales, Pedro Sánchez, ha arrancado este jueves la campaña denunciando "la involución y el retroceso" Alberto Núñez Feijóo por pactar con Santiago Abascal. Alertar sobre ello, ha dicho, es su "deber" como líder del actual Ejecutivo y secretario general de los socialistas.
Sánchez ha centrado gran parte de su discurso en meter en el mismo saco al Partido Popular y Vox -en ningún momento ha mencionado a Feijóo sin mentar también a Abascal- a raíz de los pactos que ambas formaciones están firmando tras el 28-M.
El presidente ha criticado algunas de las medidas más polémicas de la derecha. Ha dicho que se están parando de construir carriles bici, que se ha retrocedido "40 años en derechos de las mujeres" y "80 años en censura de la cultura de nuestro país" en aquellos lugares en los que gobiernan.
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"Cuando quitan banderas [LGTBI] están quitando derechos", ha asegurado. "Son el túnel del tiempo", les ha calificado, y ha apelado directamente a los electores de ambos partidos: "los votantes de PP y Vox son mucho mejores que sus dirigentes", ha dicho, "España es mucho mejor que el PP y Vox".
El discurso de Sánchez, profundamente emocional, confirma que el PSOE ha pegado un viraje de 180 grados en su campaña respecto al 28-M. Si para las autonómicas y municipales los socialistas se centraron en los logros del Gobierno y en aprobar medidas, para el 23 de julio están apelando directamente a los sentimientos.
Con ello, aseguran fuentes del partido, buscan conseguir la movilización que les faltó en mayo. Sánchez también ha hablado directamente a los "que no hayan votado al PSOE nunca" y les ha invitado a hacerlo si no les gusta "el tráiler de esa película tenebrosa que están siendo los pactos entre Abascal y Feijóo".
La del 23-J será una campaña atípica en el PSOE. Sánchez apenas va a participar en actos. Canceló el que tenía en Plasencia este sábado y, de momento, sólo hará cuatro: presentará su programa el viernes en Madrid, el sábado 15 irá a Valencia, el domingo 16 a Barcelona y volverá a la capital para cerrar la campaña.
Eso es todo. Desde el partido reconocen que han priorizado las entrevistas en distintos medios de comunicación porque ayudan a llegar a millones de personas, frente a los actos que al final acaban en 20 segundos resumidos en un telediario.
El programa, mañana
Sánchez ha arrancado la campaña sin todavía haber presentado el programa electoral del PSOE. El PP y Sumar ya lo han hecho, y los socialistas lo harán este viernes en Madrid. Sin embargo, el presidente sí ha adelantado algunas de las medidas que incluirá.
El presidente se ha comprometido a lograr el pleno empleo la próxima legislatura, a extender siete años las hipotecas para las familias de clase media y baja, a vincular el SMI al salario medio para que represente el 60% del mismo y a ampliar el permiso de paternidad de 16 a 20 semanas.
"A cada insulto, vamos a responder con una propuesta", ha advertido. "Hemos logrado una España en convivencia, con pleno empleo y libre de corrupción. Así nos presentamos el 23 de julio", ha añadido. Y ha aventurado: "os voy a hacer un spoiler, vamos a ganar las elecciones".
Otro de los puntales de la campaña electoral será la defensa de la transición ecológica para combatir el cambio climático. No en vano Sánchez ha estado acompañado por la vicepresidenta tercera y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, que ha dicho que, si llega el PP al Gobierno, "habremos retrocedido varias eras geológicas y habremos vuelto a la situación de la caverna".