Rubén Manso, exportavoz económico de Vox, cree que una repetición electoral sería "mortal" para la formación de Santiago Abascal. Como consecuencia de la crisis generada por la salida de Iván Espinosa de los Monteros, lograrían unos resultados "muy malos", ha asegurado Manso.

Manso alerta de la "deriva ideológica" de Vox, tras las purgas y dimisiones de los más liberales del partido. Según el exdiputado -purgado de las listas del 23-J él mismo-, estás pérdidas han convertido ya la formación de Abascal en "un partido de nicho": se ha perdido la "ambición sana" de sus orígenes, para ser "un partido de gobierno", a su juicio.

"Si queremos partido de nicho donde tengamos 15 o 20 escañitos que nos permitan alcanzar la edad de jubilación, eso ya es otra cosa", ha ironizado durante una entrevista radiofónica en Cope.

La marcha de Espinosa del partido ha abierto una crisis en Vox que, en todo caso, podría ser "salvable", según Manso. Pero de momento, y en caso de una repetición electoral inmediata, tendría como consecuencia unos resultados "muy malos" para el partido.

"Sería un escenario muy catastrófico para Vox porque sabemos que los electores castigan las crisis", ha razonado, añadiendo que "un resultado muy malo sería mortal, probablemente".

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Otro de los diputados caídos al no haber sido incluidos siquiera en las candidaturas para las generales es Víctor Sánchez del Real: "Se están produciendo una serie de experimentos en el ámbito de Vox, que llevan a unos resultados", ha sentenciado críptico en RTVE.

Sánchez del Real no cree que la marcha de Espinosa de los Monteros se haya producido sólo por motivos familiares. Opina que "probablemente, también las hay más profesionales que políticas". Y añade: "Ha decidido dar un paso atrás, no un paso fuera".

A su vez, el exdiputado ha concluido con respecto a la pérdida de votos y escaños que "las matemáticas no engañan" y que las cifras muestran una "transferencia de votos entre el PP y Vox". Ha hecho además un llamamiento a "hacer análisis" con "sobriedad y tranquilidad".

"No es sorpresa"

Manso ha reconocido que la salida de Iván Espinosa de los Monteros, pese a ser llamativa y dolorosa, no ha sido una "sorpresa". El ya exdirigente llevaba un año relegado, según revela Manso: "Cuando uno es portavoz, si le van relegando, vaciando o postrando, lo normal es que antes o después diga 'hasta aquí hemos llegado'".

El anterior cerebro económico de la formación de derecha extrema ha aprovechado su intervención radiofónica para diagnosticar como "un error" la posibilidad de que el nuevo portavoz parlamentario de Vox sea Ignacio de Hoces, aunque en su opinión esta opción es, de momento, sólo "un rumor". A su juicio, Espinosa fue "el mejor portavoz" durante la legislatura pasada.

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Rubén Manso ha acusado además a Vox de perder en el partido un "amplio espectro" de votantes, en el que convivían "distintas sensibilidades en paz y armonía". Ha señalado que en los últimos meses ha destacado en la formación política "una facción de corte muy, muy, muy a la derecha".

En ese lado ha situado a personas como el eurodiputado y vicepresidente de Acción Política de Vox, Jorge Buxadé; el vicesecretario institucional y ahora diputado electo, Ignacio de Hoces; o los asesores de Abascal, Kiko Méndez Monasterio y Enrique Cabanas.

También él opina que esta "deriva ideológica" ha sido la causa de la pérdida de votos en el 23-J. El Partido Popular se acercó "muy inteligentemente" a la izquierda para ganar votos de ese espectro. Pero esto hizo que Vox se escorara aún más a la derecha, dejando un vacío ideológico para los votantes que se abstuvieron en las pasadas elecciones, ha diagnosticado Manso.