Los históricos socialistas continúan mostrando su malestar con la ley de amnistía exigida por Carles Puigdemont para reeditar el Gobierno de coalición del bloque de izquierdas. El exvicepresidente del Gobierno y ex vicesecretario general del PSOE Alfonso Guerra ha pedido "como ciudadano demócrata y socialista" a Sánchez que no acepte la amnistía que exige el líder independentista porque es "insoportable". "Me rebelo contra eso, esta amnistía es la condena de la Transición", ha zanjado este jueves.
Para Guerra, la ley de amnistía "es negar todo lo que ha significado un esfuerzo enorme y la Transición para que siguiera adelante el país". En una entrevista en la Cadena Cope, el exvicepresidente ha dicho que si el PSOE acepta la amnistía significará asumir que "la democracia es represora y los golpistas son los demócratas". "Es muy grave, no lo hagan", ha reiterado.
Para Guerra, la amnistía que "plantean los nacionalistas" es una "polémica tramposa" porque, antes de debatir si cabe o no en la Constitución —"que no cabe en absoluto"— conviene "valorar si esa amnistía es justa, si es un acto puro o impuro". "Cuando se concede la amnistía en el 77 es porque termina un régimen autoritario y llega uno democrático, todo lo antiguo lo borramos porque se estaba luchando contra un régimen no democrático", ha explicado.
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Con la amnistía de Puigdemont, al que se ha referido como "golpista" y "gánster", se "pretende pasar de un sistema democrático a uno no democrático y borrar 45 años de democracia". "Es terrible, yo no me resigno, yo me rebelo contra eso: quieren destruir el régimen del 78 y soportar eso es imposible. Lo que está pasando hoy lo veo como la derrota de mi generación", ha asegurado Guerra.
También se ha mostrado perplejo porque el "1.6% de la población" —el porcentaje de votos que obtuvo Junts el 23-J— "someta al país". "Lo que no es comprensible es que dos partidos que tienen el 73% del Congreso de los Diputados [PSOE y PP] no sean capaces de ponerse de acuerdo en nada", ha lamentado, a la vez que ha pedido "acuerdos concretos" entre populares y socialistas. El exvicepresidente cree que los dos partidos mayoritarios deben "reducir el papel completamente injusto de los partidos nacionalistas".
El entonces vicepresidente de Felipe González se ha referido a las exigencias de los partidos independentistas como "rodajitas de salchichón". "Primero piden indultos, luego eliminar el delito de sedición, después modificar el delito de malversación, ahora la amnistía... y al final se acaba el salchichón", ha explicado Guerra.
También ha sido muy crítico con el viaje a Bruselas y la reunión con Puigdemont de la vicepresidenta segunda del Gobierno en funciones y líder de Sumar, Yolanda Díaz. Lo ha calificado de "infamia" y cree que "pone patas arriba a todo lo que cree un demócrata". "Que una vicepresidenta del Gobierno se marche a negociar con este tipo es una infamia. ¿Y estos son los que iban a regenerar la política...?", ha apuntillado.
Al ser preguntado sobre si Sánchez es socialdemócrata, Guerra ha evitado contestar: "Hay que preguntárselo a él". "Está haciendo cosas que encajan en la socialdemocracia en aspectos sociales, y cosas que no en aspectos institucionales", opina Guerra sobre el actual líder del PSOE y presidente del Gobierno en funciones.
Pese a mostrarse crítico con la actual dirección de su partido, Guerra no se ha olvidado del Partido Popular. "No quiero eludir la crítica que debo hacer al PP porque durante la campaña se aliaban con Vox y no han facilitado nada las cosas. Luego tienen a la presidenta de Madrid que pellizca por otro lado. Tienen que poner orden en su casa", ha sentenciado.