El PP prepara una ofensiva en ayuntamientos y CCAA para retratar al PSOE con la amnistía a Puigdemont
El PP plantea mociones en ayuntamientos y comunidades, para que cada federación socialista se vea obligada a posicionarse a favor o en contra de la amnistía.
11 septiembre, 2023 03:08El Partido Popular ha cogido impulso con la cascada de reacciones de veteranos socialistas contrarios a una hipotética amnistía para los responsables del referéndum ilegal del 1-O. Según ha podido saber EL ESPAÑOL, el partido de Alberto Núñez Feijóo prepara una ofensiva en ayuntamientos y comunidades autónomas que busca retratar al PSOE.
Una vez que encalle la investidura del candidato popular y el Rey encargue la formación de gobierno a Pedro Sánchez, el PP desplegará todo su arsenal para boicotear la negociación con Junts. La primera pantalla prevista en la formación conservadora es promover mociones sobre la amnistía en todos los plenos municipales y autonómicos para inquirir a los dirigentes socialistas.
Los populares buscan abrir grietas en el PSOE, cada vez más dividido por este asunto. Hasta las elecciones del 23-J, los principales mandos socialistas descartaban de plano la mera hipótesis de que se pudiera aplicar una amnistía a los implicados en el procés soberanista. Ahora, el panorama ha cambiado y Sánchez está dispuesto a pagar el precio que ha fijado Puigdemont para ceder el apoyo de sus siete diputados en el Congreso.
[Al menos 20 de los actuales diputados del PSOE se han pronunciado públicamente contra la amnistía]
En los próximos días, la dirección nacional del PP analizará los pormenores de esta acción coordinada que pretende llevar a cabo a nivel territorial y que tiene como fin último presionar y enfrentar al PSOE, además de "socializar la respuesta a un planteamiento que se basa en que lo que es delito en Ávila no lo sea en Barcelona".
Los populares abundarán en la "desigualdad" territorial que, según consideran fuentes del partido, trae consigo la reelección de Sánchez como presidente. "Los votantes de Guadalajara, Jaén o Zaragoza no eligieron en julio al PSOE para ser tratados de forma peor o diferente", argumentan en Génova, donde inciden en que la preponderancia de los independentistas rompe con la balanza en España.
Mociones en Aytos y CCAA
Con las mociones en ayuntamientos y comunidades, cada federación socialista se verá obligada a posicionarse a favor o en contra de la amnistía. Génova quiere ahondar en la división interna dentro del partido, con voces discordantes como la de Emiliano García-Page o Javier Lambán, para que la presión sobre Sánchez sea insostenible y se vea obligado a renunciar a los apoyos de Junts.
En el horizonte otea la repetición electoral. En público, el PP la califica como indeseable. El discurso oficial es que las urnas pidieron "diálogo" y que la mejor opción, antes que ir a votar otra vez, sería que Sánchez atendiera a la petición de Feijóo de alcanzar un entendimiento que alumbre una legislatura "corta" con seis pactos de Estado. En privado, dado lo irreal de este supuesto, más de un dirigente de la cúpula popular reconoce su entusiasmo por volver a las urnas.
Para el PP es "inaceptable" que el Gobierno esté dispuesto a cambiar de postura en una cuestión tan sensible como la amnistía por una sencilla razón: que a Sánchez no le dan los números para seguir en la Moncloa. Así lo explica el argumentario interno del partido: "Lo único que cambió desde que el Gobierno rechazaba tajantemente la amnistía a su apoyo actual es que perdió las elecciones".
"Las condiciones de Puigdemont para la investidura son inaceptables e inasumibles y así lo decían Sánchez, su vicepresidenta, su ministro de Justicia (en referencia a Juan Carlos Campo, ahora magistrado del Tribunal Constitucional) y su candidato en Cataluña. Meses después dicen lo contrario porque están dispuestos a todas las cesiones para aferrase al poder", critican en Génova.
Cada vez son más las voces de exdirigentes socialistas que se manifiestan en contra de la amnistía. Ante lo que el PP apostilla: "Si Sánchez no les hubiese mentido y hubiese dicho en campaña lo que estaba dispuesto a hacer, su resultado electoral sería otro. Sólo el 6% de los votantes españoles son independentistas y no pueden condicionar la gobernabilidad de este país y hacerlo por encima de la ley".
La dirección popular enfatiza que "no vale todo en política" e insiste con que Feijóo "no aceptará chantajes al Estado para llegar al poder". En ese sentido, los populares resumen con tres puntos las exigencias de Puigdemont: "Que no haya igualdad de los ciudadanos ante la Ley, que se conceda la independencia a Cataluña y que se financie esa independencia".
Este lunes, se reúne en la Junta Directiva Nacional del PP en Madrid. En la sede de Génova se dará cita la plana mayor del partido, que aprovechará la ocasión para zanjar cualquier división interna y cerrar filas en torno al candidato. Desde el principio, Feijóo tuvo claro que, tras ganar las elecciones, tenía la obligación de someterse a la investidura para, al menos, ganar el relato.
A falta de cuatro apoyos imposibles, lo importante ahora para los populares es visualizar que existe una alternativa "frente a los que dicen que o se acepta el chantaje independentista o se repiten las elecciones". Existe la posibilidad, destacan, de "un acuerdo entre los partidos nacionales para defender la igualdad de todos los españoles".