Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) ya ejerce su nuevo "derecho", recién estrenado, para legislar en catalán. Lo ha hecho este viernes con una proposición de ley para la reforma de la Ley del Deporte que pretende minar la capacidad de las federaciones españolas para convocar a deportistas para sus selecciones nacionales.
Aprovechando el llamado caso Rubiales, y el motín de las futbolistas españolas, recientemente ganadoras de la Copa del Mundo, los independentistas catalanes desempolvan su vieja exigencia de que los deportistas "voluntariamente" puedan negarse a representar a España en competiciones internacionales.
Fuentes oficiales de ERC confirman del registro del escrito -al que ha tenido acceso este periódico- este mismo viernes en castellano y el lunes la otra lengua cooficial en la Comunidad Autónoma. "Será la primera proposición de ley en catalán", aseguran fuentes del Grupo Parlamentario Republicano.
Esquerra pretendía llevar el documento este mismo viernes, pero los letrados del Congreso no lo han permitido porque el Boletín Oficial de las Cortes aún no ha publicado la reforma del Reglamento del Congreso. Lo hará en su edición del lunes y será entonces cuando la Cámara Baja pueda aceptar, oficialmente, iniciativas no sólo en castellano, sino en cualquiera de las lenguas cooficiales reconocidas en la Constitución y sus respectivos Estatutos de Autonomía.
La reforma fue aprobada este jueves, al ser aprobada por 180 diputados de la Cámara Baja. Una representante del PP se equivocó al apretar el botón y añadió un apoyo a los 179 previstos (los 178 que dieron la Mesa al PSOE además del de Coalición Canaria, que en esta ocasión se unió a las posturas nacionalistas).
La presidenta del Congreso, Francina Armengol, ya había admitido que los diputados hablaran en la lengua cooficial de su región durante el pleno, como si la norma ya estuviese en funcionamiento. De hecho, la Mesa (controlada por el PSOE) autorizó la compra urgente de 450 pinganillos, el alquiler de 650 transmisores y la contratación de 12 intérpretes autónomos para la traducción simultánea de las intervenciones.
Esta decisión provocó una dura polémica, e incluso la petición - por parte del Grupo Parlamentario Popular- de que el pleno se suspendiera, alegando que se estaba incumpliendo el mismo Reglamento que se proponía reformar. Este diario informa de que los populares revertirán la reforma cuando vuelvan a gobernar.
En todo caso, aún faltaba que algún grupo se estrenara en el nuevo "derecho" por escrito, en el Registro del Congreso. Así lo hace el Grupo Republicano, registrando una proposición de la ley para que la Ley del Deporte ampare la presencia "voluntaria" de "cualquier jugadora o jugador" en las selecciones españolas.
ERC exige que atender la llamada de la selección, en cualquier deporte, "deje de ser considerada un deber y sea exclusivamente un derecho". A esto añaden los independentistas catalanes la capacidad de "elección libre de cualquier deportista para decidir si acudir o renunciar a la convocatoria", una vez que ésta haya sido publicada.
Utilizando a Iceta
ERC aprovecha las declaraciones del ministro de Cultura y Deporte, el pasado martes, antes del pleno del Congreso. Miquel Iceta anunció que su Ministerio se iba a implicar "a fondo" en la resolución del motín anunciado por las futbolistas españolas. Las jugadoras habían anunciado, mediante un comunicado previo a su convocatoria por la RFEF, que se declaraban "no seleccionables" y, aun así, habían sido llamadas para participar en dos partidos de la Liga de Naciones, el primero de ellos, este mismo viernes contra Suecia.
Iceta aseguró que "en ningún caso" las jugadoras serían sancionadas, incluso si después de haber acudido a la concentración en Oliva (Comunidad Valenciana) decidían abandonar la selección. "Sería una injusticia", sentenció el ministro. "La Federación está haciendo las cosas muy mal, no tiene derecho a privar a España de ka selección femenina", llegó a sentenciar el ministro.
"El presidente del CSD, Víctor Francos, va a implicarse personalmente, para que corrijan las deficiencias de una convocatoria anómala", añadió Iceta. Dejaba, así, abierta la puerta a que la voluntad de las futbolistas prevaleciera sobre la que marca la ley del Deporte.
ERC aprovecha, pues, la noticia de que "parte de las jugadoras femeninas de la selección española se han visto obligadas a formar parte de la selección, cuando específicamente han emitido comunicados previos renunciando a formar parte de ella", según fuentes de la formación separatista catalana.
Los republicanos independentistas quieren acabar con la potestad de las federaciones deportivas para que una renuncia a participar conlleve un expediente que pueda derivar en sanciones, respaldadas por la actual Ley del Deporte.
Los castigos contemplados van desde multas "muy elevadas", según Esquerra, a la suspensión de la licencia federativa. El argumento que esgrime el escrito es el de "la defensa de la autonomía de la voluntad de las y los deportistas, así como en la arbitrariedad con la que se aplican las llamadas sanciones".