El PP pide protestar contra los "desvaríos" de Sánchez sin incurrir en "excesos" que le den oxígeno

Eso sí, el PP, como remarcó ayer su número tres, Elías Bendodo, pide protestar contra los "desvaríos" del presidente en funciones sin incurrir en "excesos" que le den oxígeno. Un claro aviso a Vox, que ha decidido secundar las convocatorias del PP con una acción paralela: una vez que finalice la concentración, los dirigentes de Vox tratarán de desviar a los manifestantes hasta las puertas de las sedes del PSOE.

Feijóo estará en la madrileña Puerta del Sol, donde pronunciará un breve discurso. A pie de calle le acompañarán Isabel Díaz Ayuso, José Luis Martínez-Almeida, Borja Sémper y... Santiago Abascal, que aunque no ha cursado invitación alguna, ha decidido acudir junto a su séquito hasta el mismísimo kilómetro cero. El líder de Vox marchará después, a la una de la tarde, hacia Ferraz, epicentro de los únicos episodios violentos que se han producido en las protestas contra la amnistía. 

Por noveno día consecutivo, miles de ciudadanos acudieron en la tarde-noche de ayer a la sede nacional del PSOE. Pasadas las diez de la noche, se volvieron a desatar cargas policiales cuando grupos radicales de ultraderecha trataron de sobrepasar el perímetro de seguridad. Pese a ello, Vox sigue incitando el asedio a las sedes socialistas.

"Mañana estaremos en las manifestaciones convocadas en las plazas de España, como estamos acudiendo a todas las que se convocan. No es momento de partidos, es el momento del pueblo español. También iremos a las marchas que se han convocando para ir después a protestar frente a las sedes del PSOE. Si el golpe lo da el PSOE, lo normal y lógico es manifestarse ante sus sedes", subraya el partido verde en sus redes sociales.

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Aferrándose a estos actos vandálicos, el presidente del Gobierno en funciones justificó este sábado en Málaga, durante la convención de los socialistas europeos, la legitimidad de su próximo Ejecutivo. Sobre la reacción callejera a sus pactos con Puigdemont, Junqueras y Otegi, dijo Sánchez: "En estos días, la ultraderecha más nostálgica de esa cruel dictadura franquista exhibe símbolos y proclamas de un pasado oscuro para España". 

En todo momento, eludió defender el contenido de lo acordado con los independentistas para mantenerse en el poder. De igual forma, el presidente socialista ignoró los reproches que sus alianzas han recibido estos días de espectros tan diversos de la sociedad española, como la práctica unanimidad de: jueces, fiscales, abogados del Estado, diplomáticos, policías, guardias civiles, inspectores de Hacienda y de Trabajo y hasta de historiadores.

La creencia de buena parte de la sociedad civil es que la alianza del PSOE con Junts atenta contra el Estado de derecho, la independencia judicial y la separación de poderes. De ahí las iniciativas que están llevando a cabo plataformas como Junta Democrática, heredera de aquel movimiento que abanderó en el epílogo del franquismo el jurista Antonio García-Trevijano.  

En la tarde-noche de este sábado, Junta Democrática, de corte republicano y presidida por el joven abogado Rubén Gisbert, congregó a un millar de manifestantes en el Congreso de los Diputados. Una vez leído el manifiesto, algunos de ellos instalaron tiendas de campaña, iniciando una acampada contra la amnistía y "la herencia política del régimen del 78", que califican como "inoperante e ineficaz". 

Poco antes de la medianoche, la policía disolvió la acampada frente a la Cámara Baja. Pero todo apunta a que las movilizaciones contra las cesiones de Sánchez al independentismo para su reelección como presidente, lejos de menguar, irán a más en los próximos días. A las concentraciones del PP de este domingo hay que sumar una gran manifestación que se está gestando en Madrid el próximo sábado 18 de noviembre. 

En el manifiesto que leerá este domingo en las plazas de toda España, el PP defenderá: "La indignación que sentimos ha de convertirse en un clamor que se oiga en toda España y llegue a todas las democracias amigas. Porque la democracia europea está en juego cuando la democracia española está en peligro. Quieren nuestro silencio, pero van a tener una respuesta serena y firme. Tenemos la convicción de que la democracia española prevalecerá. Algún día la historia contará que España se puso en pie, con serenidad y firmeza, para decir basta y para defender la igualdad entre los españoles".