La presidenta de Junts, Laura Borràs, ha apoyado las palabras pronunciadas por Míriam Nogueras el pasado martes en el Congreso de los Diputados en las que llamó "indecentes" a los supuestos jueces del lawfare: "Espejel, Lesmes, Llarena, Lamela y tantos otros que en un país normal serían cesados y juzgados de inmediato. Pero en el Reino de España", añadió, "tienen vía libre para seguir retorciendo la ley y los derechos. Vía libre para acusar a muchos independentistas catalanes de terroristas, sólo por ser independentistas".
En aquella intervención, Nogueras los definió como "una serie de personas indecentes que deberían ser cesadas y procesadas" y ahora, la presidenta de Junts cree que la portavoz en el Congreso "se quedó corta, porque la lista de jueces es mucho más larga".
Para Borràs, el "lawfare es la utilización de los tribunales en una determinada finalidad política. Esta semana hemos dicho que no puede haber en la cúpula del poder judicial cargos caducados", pero ha querido matizar que desde Junts "no queremos reformar a España, nosotros queremos irnos".
"Trabajaremos para conseguir que todo lo que incide negativamente en Cataluña pueda dejar de hacerlo. ¿Es una anomalía que el CGPJ esté caducado? Lo es. Esta anomalía acaba teniendo consecuencias nefastas para Cataluña, porque desde esa politización de la cúpula judicial se van produciendo persecuciones, sentencias o imputaciones", dice una Borrás que asegura que Junts está en el Congreso para "trabajar para modificar algo que está afectando negativamente a Cataluña".
En una entrevista en ARA, Borràs ha lamentado la desunión que se está viendo entre ERC y Junts: "Si ahora estamos viendo la fuerza que tienen siete diputados en Madrid, imaginen lo que habríamos hecho teniendo 23 diputados", decía la presidenta independentista que asegura que las negociaciones con el Gobierno de Sánchez "se han llevado a cabo con mentalidad de país"
Una vez más, Borràs ha vuelto a alardear de lo que se ha conseguido en las negociaciones con el Gobierno de Sánchez, logrando "lo que parecía imposible" como el catalán en el Congreso, la solicitud de la oficialidad en Europa, las comisiones de investigación sobre los atentados de Barcelona y Cambrils del 17 de agosto, o sobre Pegasus. "Y sobre todo, una ley de amnistía que hace tres meses nos decían que era imposible, que no cabía en la Constitución. Y el PSOE la registra, comienza su trámite parlamentario, y ahora dice que es lo mejor para España", ha enfatizado.
También ha querido alertar a Sánchez, al igual que ya hiciera Puigdemont desde Bruselas asegurando que "el acuerdo de investidura dice claramente que es de investidura" y "la legislatura durará lo que dure el cumplimiento de los acuerdos. Si no se cumplen existen consecuencias".
Sobre las negociaciones con el mediador, la expresidenta del Parlamento catalán ha dicho que "mantendrán el secretismo" pero ha querido dejar clara la posición del partido y del objetivo para con el Gobierno "la cesión del cien por cien de los tributos y un referendo de autodeterminación".
También ha tenido palabras para Sánchez y su cambio de criterio con Puigdemont al decir que "quien hablaba del presidente Puigdemont en términos de fugado era el presidente español. Ahora, en cambio, hablan de presidente Puigdemont. Por tanto, el giro copernicano ha venido por parte del PSOE y Sánchez".