El presidente del PP de Barcelona, Daniel Sirera, ha recordado este miércoles que hace apenas dos años, en noviembre de 2021, un grupo de voluntarios recogió 800.000 pellets de plástico en tan sólo dos horas en la playa de la Pineda, situada en el municipio de Vilaseca (Tarragona).
"No te enteraste porque ni en Vilaseca ni en Cataluña gobierna el PP", ha denunciado Sirera. El dirigente popular ha resaltado así que, a diferencia del ocurrido ahora en Galicia, aquel vertido no provocó ninguna reacción política, porque no se produjo en período electoral ni servía para perjudicar a los intereses del PP.
En aquella ocasión, un pequeño grupo de voluntarios coordinado por la ONG Good Karma Projects recogió en tan sólo dos horas cerca de un millón de pellets, procedentes de vertidos de la industria química del área metropolitana de Barcelona.
Los voluntarios estimaron que, pese a este trabajo, tan sólo habían logrado recoger una pequeña parte de los residuos, pues su muestreo detectó una media de 1.000 pellets por medio cuadrado de arena en la playa.
La noticia no mereció la atención de los grandes medios de comunicación: sólo se hicieron eco algunos medios locales como el Diari de Tarragona.
Good Karma Projects había puesto en marcha esta campaña tras detectar en 2018 un total de 120 millones de pellets en la misma playa de la Pineda. Su presencia no se debía a ningún vertido masivo, sino a la cercanía de varias industrias petroquímicas situadas en Barcelona y Tarragona.
La misma entidad estimó que este residuo está presente, en grandes cantidades, en todas las costas del Mediterráneo, también en zonas medioambientales especialmente frágiles de Baleares.
Dentro de la misma campaña, la ONG Good Karma Projects transmitió la información al Ministerio de Transición Ecológica y a la Comisión Europea, para que tomen medidas con el fin de frenar de forma global este tipo de contaminación marítima.
En el caso del vertido provocado por el buque Toconao, del que el Portugal informó al Gobierno español el pasado 8 de diciembre, se estima que miles de pellets han llegado ya a las costas de Galicia, Cantabria, Asturias, País Vasco y Francia.
Como ha informado EL ESPAÑOL, el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Noia ha abierto diligencias por la posible existencia de un delito contra los recursos naturales y el medio ambiente, tras recibir una denuncia de Podemos y otra de varias asociaciones ecologistas, a raíz del vertido del buque Toconao.
La titular del Juzgado ha ordenado a la Unidad del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil que elabore un informe que recoja "los datos recabados en relación con la titularidad de la embarcación Toconao, las circunstancias en las que se produjo la pérdida de la carga, el contenido de dicha carga, la composición y posible toxicidad de los pellets vertidos, así como el alcance del vertido y la delimitación del área afectada".