Alberto Núñez Feijóo se ha encerrado tres días y dos noches con los miembros de su cúpula en un hotel de Toledo. La intención que tiene es "rearmar" al Partido Popular en la lucha contra Pedro Sánchez. Se trata de una suerte de "auditoría interna para ganar estrategia", según explican fuentes de la dirección a EL ESPAÑOL.
Después de renovar todas las estructuras del PP, con las nuevas incorporaciones en la dirección nacional y los cambios en el Congreso y el Senado, Feijóo está llevando a cabo un proceso que tiene por objeto establecer una nueva hoja de ruta con la que afrontar la legislatura y lo que está por venir en este año: tres nuevas citas electorales que marcarán el futuro político de España.
El presidente popular llegó a la capital castellanomanchega el jueves por la tarde. La primera jornada, que concluyó entrada la madrugada, estuvo más enfocada al análisis electoral. Tomaron la palabra el propio Feijóo, para dar la bienvenida; la secretaria general, Cuca Gamarra, y el vicesecretario de Política Municipal y Autonómica y Análisis Electoral, Elías Bendodo.
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Durante el viernes, además de una reunión del comité de dirección, distintos vicesecretarios fueron protagonizando distintas comparecencias en las que expusieron informes que Feijóo les ha pedido para esta ocasión. El líder popular quiere conocer, de primera mano, todo lo que los suyos tienen que aportar sobre las áreas que dirigen.
De esta forma, aseguran en Génova, se pueden explorar nuevas temáticas que sirvan para redefinir el rumbo del partido. "Los vicesecretarios son como los jefes de división de una compañía y lo que están haciendo en estos días es reportar al jefe de la labor que les ha sido encomendada", recalcan las citadas fuentes.
El tema principal de este cónclave es la estrategia para plantar cara al Gobierno y sus socios. Tanto en términos "propositivos como reactivos", con una acción de oposición "más eficaz". La idea de Feijóo es realizar un "control más férreo" a Sánchez. "Vamos a marcar a los ministros con una intensidad que nunca antes se ha visto", anticipan en el sanedrín popular.
Pero no sólo. Otro asunto a abordar en estos días es la relación con Vox. Los pactos autonómicos del PP con este partido determinaron en gran parte el resultado electoral del 23-J, con una movilización imprevista en el electorado socialista que impidió la llegada de Feijóo la Moncloa. Ahora el reto es mantener la estabilidad de los gobiernos territoriales de coalición y conseguir a la vez que los exabruptos de Vox no pasen factura.
"La única alternativa"
Este jueves, justo después de encerrarse con los suyos en Toledo, Feijóo publicó en su cuenta de Twitter unas imágenes del encuentro con el siguiente mensaje: "He reunido al Comité de Dirección del PP para seguir trabajando en el escenario que nos deja un Gobierno debilitado por sus socios. Buscamos soluciones para mejorar la calidad de vida de todos los españoles, nuestro compromiso con ellos es nuestra única motivación".
Este viernes, volvió a compartir nuevas instantáneas del encierro con un segundo mensaje: "Somos la única alternativa a un Gobierno que trabaja sólo por su supervivencia. Sánchez ha entregado España a un prófugo cuyo objetivo es desestabilizar nuestra nación".
En la jornada del sábado está previsto que concluyan las jornadas de trabajo los portavoces parlamentarios del Congreso y el Senado: Miguel Tellado y Alicia García. Luego, intervendrá Feijóo para finalizar la convivencia, que tiene también un objetivo más humanístico de hacer equipo y fortalecer las relaciones más allá del plano laboral.
Además de esta convivencia de la dirección de Génova, Feijóo ha decidido ir reuniendo, poco a poco, a todos los cuadros del PP. El martes celebró el Comité Ejecutivo Nacional y mantuvo un almuerzo con todos los barones, la semana próxima ha convocado una interparlamentaria en Orense. Finalmente, ha fijado una Junta Directiva Nacional, principal órgano entre congresos, a finales de enero.