El Gobierno no ha aclarado este martes si Maxim Kuzmínov, el piloto ruso que desertó a Ucrania y fue asesinado a tiros en Villajoyosa (Alicante) la semana pasada, tenía algún tipo protección policial por parte de España y se ha remitido a la investigación de la Guardia Civil sobre el caso.
"Está bajo investigación. Hay que dejar a la Guardia Civil que trabaje", ha asegurado este martes la ministra de Educación y portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, en rueda de prensa tras el Consejo de Ministros.
A preguntas formuladas por periodistas sobre si el Gobierno conocía la presencia de Kuzmínov en nuestro país y contaba con algún tipo de protección especial tras desertar del Ejército ruso, Alegría no ha respondido a ninguna de ellas y se ha limitado a señalar el caso "está bajo investigación", sin dar, por tanto, ningún tipo de dato ni aclarar las dudas que rodean este asesinato.
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Según informa este martes EL ESPAÑOL, Maxim Kuzmínov fue asesinado el pasado 13 de febrero en Villajoyosa por "un grupo profesional" que vigiló su rutina en Alicante y todas las cámaras de seguridad. Desde un primer momento la Guardia Civil investigó lo ocurrido como un ajuste de cuentas, ya que la víctima recibió en la rampa del garaje de una urbanización media docena de impactos de bala y posteriormente el vehículo en el que huyeron los asesinos pasó por encima del cuerpo. Poco después, ese coche fue encontrado calcinado a varios kilómetros, en la localidad de El Campello.
Aunque la documentación que se encontró del fallecido en Villajoyosa no corresponde con la de Kuzmínov, porque acreditaba que era de un individuo de 33 años de nacionalidad ucraniana, las fuentes policiales y el inteligencia militar ucraniana (GUR) han confirmado que se trata del piloto ruso que desertó el pasado verano. La identidad se confirmó por las huellas dactilares, ya que la documentación que llevaba encima era falsa.
Una fuente del GUR ha declarado al medio ucraniano Ukrainska Pravda que Maxim Kuzmínov había decidido ir a vivir a España en vez de quedarse en Ucrania, que le garantizó protección tras explotar esta deserción con fines propagadísticos.
Maxim Kuzminov a los mandos de un helicóptero.
Rusia: "Es un traidor y un cadáver moral"
Tras confirmarse la identidad de Maxim Kuzmínov, el jefe del Servicio de Espionaje Exterior de Rusia, Serguéi Narishkin, ha asegurado este martes que es un "traidor criminal" y que desde su deserción era "un cadáver moral".
"Este traidor y criminal se convirtió en un cadáver moral en el momento en que planeó su sucio y terrible crimen", ha dicho Narishkin, según informa la agencia oficial rusa RIA Nóvosti. Desde el Kremlin, su portavoz Dimitri Peskov ha señalado hoy que "no tenemos ninguna información sobre este asunto".
Cuando la televisión pública rusa informó de esta deserción el pasado octubre acompañó la noticia con la advertencia de que la orden para liquidarle ya había sido dada. Meses después Kuzmínov fue asesinado a tiros el pasado 13 de febrero en el garaje de una urbanización de Villajoyosa (Alicante) tras desertar en agosto de 2023 del Ejército ruso para entregarse a Ucrania con el helicóptero de combate que pilotaba.
Desertó a cambio de dinero y protección
La deserción de Kuzmínov se dio a conocer en septiembre del año pasado cuando el GUR ucraniano publicó unas imágenes en las que el Kuzmínov -que entonces tenía 28 años- explicaba cómo fue contactado por la inteligencia militar enemiga, que le ofreció pasarse al lado ucraniano a cambio de dinero y protección.
En el vídeo puede verse el aterrizaje de Kuzminov con su helicóptero, un Mi-8 de combate, en una base militar de la región de Járkov, en el este de Ucrania y fronteriza con Rusia.
Según informó en su momento el jefe del GUR ucraniano, Kirilo Budánov, Kuzmínov cruzó la frontera volando por debajo del área de detección de los radares junto con otros miembros de la tripulación que no sabían de los planes del piloto y murieron cuando intentaban huir después del aterrizaje, aunque se cree que fue Kuzmínov quien les mató tras negarse a rendirse, aunque esta información no está confirmada.
Budánov también explicó entonces que la inteligencia militar ucraniana había logrado sacar de Rusia a la familia del piloto desertor, que también contó en el vídeo que Ucrania le garantizaron su seguridad, le ofrecieron nuevos documentos y una compensación de medio millón de dólares antes de proceder a planificar la operación.
Kuzmínov no quería ir a la guerra
Maxim Kuzmínov no quería ir a la guerra y acabó por volar con su helicóptero a Ucrania en una operación conjunta con el servicio de inteligencia de ese país.
El piloto, de 28 años, se graduó de la Escuela de Aviación de Sizran, en el sur de Rusia. Fue destinado a servir en el Lejano Oriente ruso, donde entre sus compañeros tenía fama de ser una "persona tranquila" y pedir "trabajo pacífico", operaciones de carga que no tuvieran que ver con misiones militares, según el canal de Telegram ruso Baza.
Kuzminov durante su entrevista en la televisión ucraniana días después de desertar.
Sus amigos dicen que Maxim tenía "miedo a morir en la guerra" y quería dejar el Ejército incluso antes del comienzo de la guerra en Ucrania, pero "no le dejaban". Además, al piloto le aterrorizaba la idea de ser capturado en Ucrania.
De acuerdo con Baza, la madre de Kuzmínov también habría abandonado Rusia antes de que su hijo desertara a Ucrania con su helicóptero.
Mientras, en Rusia, el Comité de Instrucción militar incoó una causa por "traición" contra Kuzmínov y los familiares de sus dos compañeros muertos pidieron que pagara con su vida por lo que hizo. El 13 de febrero de 2024 Maxim Kuzmínov apareció acribillado a tiros en Villajoyosa (Alicante).
"Si Maxim realmente hizo lo que hizo, espero que lo encuentren y lo maten", dijo la esposa de uno de los compañeros del helicóptero. El 13 de febrero de 2024 Maxim Kuzmínov apareció acribillado a tiros en Villajoyosa (Alicante).