La presidenta del Congreso, Francina Armengol, no ha aclarado quién de la trama de Koldo García contactó con el Govern balear para la compra de mascarillas durante la pandemia. Tampoco si habló personalmente con José Luis Ábalos sobre esta cuestión durante los peores meses de la Covid.
"Nos llegaron a todos los miembros del Gobierno nombres de empresas, de contactos...", ha señalado, negando tajantemente que ni el exministro "ni nadie del Gobierno, y nadie es nadie," la haya presionado o coaccionado para contratar con la empresa del caso Koldo.
Lo que sí ha admitido Armengol, que ha rechazado dimitir, es que las mascarillas que compraron los técnicos del Servicio Balear de Salud de su Gobierno, por las que pagó 3,7 millones de euros a Soluciones de Gestión - la empresa de la trama-, "no filtraban como FFP2" como aseguraba el vendedor.
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"Se compran legalmente esas mascarillas y nosotros lo mandábamos todo a analizar al Instituto Nacional de Higiene y Seguridad en el Trabajo, que nos dice que no es que sean unas mascarillas malas o fake, sino que no filtran como FFP2 pero que sirven como mascarillas quirúrgicas, por lo que los servicios de salud y los técnicos deciden almacenarlas", ha explicado en una rueda de prensa desde el Congreso en la que ha defendido que su Gobierno "se dejó la piel" para proteger a los ciudadanos.
Sí hubo reclamación
En ella ha señalado que en esos primeros meses de pandemia "la realidad era que no teníamos material para proteger a la ciudadanía" y que su Gobierno recibía muchos nombres de empresas de distintas personas recomendando con quién contratar y que todo eso se enviaba a los técnicos del Servicio Balear de Salud para que revisaran precios y materiales y decidieran si contrataban o no.
De esta forma, la expresidenta balear carga al Servicio Balear de Salud con la responsabilidad de la compra de estas mascarillas defectuosas. "¿De verdad creen que si hubiéramos estado en alguna trama hubiéramos reclamado el material?", ha preguntado.
Sobre la reclamación de esas mascarillas defectuosas, Armengol ha explicado que en marzo de 2023 -tres años más tarde debido a la "lentitud" de la Administración- su Gobierno inició los trámites para reclamar a la empresa del caso Koldo el sobrecoste de las mascarillas y que en julio de 2023 se formaliza la reclamación previo aviso al nuevo Govern. En ese sentido, ha pedido saber qué ha pasado con esta reclamación. "Debe explicar -Marga Prohens- claramente qué ha hecho con ese expediente de reclamación", ha retado.
En cualquier caso Armengol ha insistido en que no se inició el expediente durante la legislatura de Prohens, ahora presidenta de Baleares tras las elecciones de mayo de 2023. Lo que sí ocultó Armengol a Prohens, como publicó EL ESPAÑOL, es que Anticorrupción ya investigaba a su Gobierno por la estafa de Koldo.
Durante su comparecencia, Armengol ha insistido en al menos dos ocasiones en que no recibió presiones o coacciones para comprar mascarillas "en una empresa u otra". También en hasta dos ocasiones se le ha preguntado quién del Ministerio de Fomento les comentó el nombre de la Soluciones de Gestión, si fue el entonces ministro José Luis Ábalos o su asesor, Koldo García Izaguirre, uno de los detenidos, pero no ha precisado.
"Ni a mí, ni a mi Gobierno, nadie, y nadie es nadie, ni nos dio una orden, ni nos presionó, ni nos coaccionó, ni nos pidió que contratáramos a ninguna empresa. Y nadie es nadie. Ni eso ni que renunciáramos a reclamar a la empresa el dinero", ha dicho.
En esta línea también ha aclarado que durante sus ocho años al frente del Govern balear y cuatro en el Consell Insular de Mallorca "jamás en mi vida he dado ninguna instrucción a nadie de mis gobiernos para que contraten a una empresa u otra". "Jamás en la vida, porque yo no soy de esas, porque yo tengo claro por qué estoy en política y por eso salgo aquí a defenderlo con toda claridad", ha proseguido, dejando claro que entró en política para "luchar contra la corrupción".
No va a dimitir
Armengol también ha anunciado que tomará medidas contra el PP porque "ha roto todas las líneas rojas" al involucrarla en la presunta corrupción del caso Koldo por la compra de mascarillas: "No dejaré que mancillen mi nombre y que lo mezclen con nada que se parezca a la corrupción".
Ha criticado que el principal partido de la oposición quiera "embarrar" la política al registrar iniciativas, como la de su dimisión por "colaboradora necesaria" en esta presunta trama corrupta, que está "viendo con dolor".
"Ni yo ni nadie de mi Gobierno está siendo investigado, ni sale en el sumario ni nada de nada. Pido responsabilidad al PP y que estén a la altura de las circunstancias. Yo voy a defender mi nombre, el de mi Gobierno y el de esta institución porque los ciudadanos no se merecen según qué espectáculos", ha reiterado tras pedir al PP de Baleares que dé explicaciones "con documentos".
También ha descartado dimitir y asumir responsabilidades como le piden todos los partidos de la oposición. "Yo no estoy investigada. Han detenido a 20 personas y ninguna es de Baleares. Mi Gobierno podría ser víctima, ni es cómplice ni es colaborador", ha justificado para dejar caer que el PP es el único que sale en el sumario del caso Koldo, en clara referencia a Miguel Tellado. "Es como mínimo sorprendente que el que pide mi dimisión es el único que sale en los sumarios", ha añadido.
Según ha explicado Armengol, una de las cosas por las que entró en política fue por luchar contra la corrupción, que es algo que le "repugna" y que detesta "profundamente". De hecho, ha enfatizado que si en esos meses de pandemia "alguien se lucró, que le caiga todo el peso de la ley encima".
Como presidenta del Congreso, ha asegurado que quería preservar la institución, que es "la cuna de la democracia por excelencia", y no implicar a la tercera autoridad del Estado en luchas partidistas, pero ha decidido salir al paso de las acusaciones del PP.
"Tengo que comparecer para explicar que en política no todo vale y que todos los políticos no son iguales -ha afirmado-. La política no es embarrarlo todo, hay que decir la verdad. Pido responsabilidad al PP, que esté a la altura de las circunstancias".
3,7 millones en mascarillas
Tal y como ha publicado EL ESPAÑOL, el Gobierno de Armengol pagó hasta 3,7 millones de euros "de forma contraria a la ley" a Soluciones de Gestión y Ayuda a Empresas SL por un cargamento de casi 1,5 millones de mascarillas en abril de 2020 a la trama presuntamente corrupta del caso Koldo. Inmediatamente después de ser entregado el material sanitario, se descubrió que era "inservible para uso hospitalario".
Sin embargo, en lugar de reclamar la devolución del dinero o una indemnización, el Servicio de Salud de las islas Baleares (IbSalut) del Govern de Armengol decidió cambiar los contratos para endosarle el gasto a la UE, a través de los fondos Feder.
Es más, la Consejería de Sanidad balear emitió un certificado de satisfacción con el servicio para facilitarle más contratos al entramado presuntamente corrupto. Y no inició los trámites para proponer una reclamación hasta el mismo día en que el Parlamento balear investía a su sucesora, la popular Marga Prohens.
A pesar de que no fue informado de que Anticorrupción investigaba al IbSalut, en apenas mes y medio, el nuevo Ejecutivo insular tramitó la reclamación y busca el modo de recuperar la totalidad del pago.