Diez meses después, Pedro Sánchez ha vuelto al Senado. Lo ha hecho entre reproches del Partido Popular. "Aquí también reside la soberanía nacional", le ha espetado la portavoz Alicia García, que ha recordado al presidente del Gobierno que cuando pisó por última vez la Cámara Alta todavía hasta negaba la amnistía.
Ahora, el olvido penal para Carles Puigdemont y los responsables del procés se ha convertido en el balón de oxígeno del Gobierno para poder aguantar la legislatura. "Vende la nación por siete votos", ha criticado García, que en su estreno frente a Sánchez se ha centrado en la medida de gracia y, también, en las últimas novedades del caso Koldo.
"Pasará a la historia como el presidente que todo lo sabía y que todo lo tapó", ha sentenciado la senadora abulense, que ve al Gobierno "acorralado por la corrupción y por el independentismo". Sobre la llamada operación Delorme, la dirigente popular ha recordado que "seis ministros, dos secretarios de organización del PSOE y la presidenta del Congreso" están bajo sospecha.
Así ha reiterado la portavoz del PP a Sánchez las preguntas que repiten estos días los dirigentes de su formación: "¿Qué sabía de las actividades de Ábalos cuando lo cesó? ¿Quién participó en el Delcygate? ¿Estaba al tanto de los contratos? ¿Qué surgió de la reunión del número dos de la Guardia Civil cuarenta días antes de la detención de Koldo? ¿Todavía alguien duda de que el Gobierno lo conocía?".
Alicia García también ha disparado contra Sánchez por el rescate de Air Europa, que el PP relaciona con la mujer del presidente, Begoña Gómez. "¿Para cuándo las explicaciones? ¿Me va a contestar o va a reservarse para la comisión de investigación?". De esta forma, la portavoz popular ha confirmado que su grupo pedirá la comparecencia de Sánchez en la comisión parlamentaria que hoy ha avalado el Senado por unanimidad y que fiscalizará la trama de Koldo.
En un momento dado, sosteniendo en su mano lo que venía a ser la carátula de un libro con el rostro de Sánchez y un título, "pasar por el aro", García ha reconducido su reproche a Sánchez por las cesiones al independentismo. "Con tal de mantenerse en el poder, pasará por todo, por lo que le digan Puigdemont, Junqueras y Otegi".
Del Ejecutivo, la portavoz del PP ha destacado el "caos y el desgobierno", ha asegurado que Sánchez es "un fracaso en sí mismo, un títere de un prófugo de la Justicia" y ha recalcado que su mandato ya forma parte de "una de las peores páginas de la historia de España".
La respuesta de Sánchez
En su respuesta, Sánchez ha disparado contra el PP a cuenta del 11-M, del que ayer se conmemoraron 20 años: "Dejen de insultar la memoria de las víctimas del terrorismo. La gran mentira del 11-M es el acta fundacional de este proyecto político destructivo que ustedes representan desde hace 20 años a esta parte".
Previamente, el presidente del Gobierno ha defendido la "estabilidad de su gobierno", augurando que aguantará hasta el final. "Lo que estamos haciendo es consolidar el proyecto de Gobierno", ha resumido tras hacer un balance de los primeros cien días.
De la amnistía, el jefe del Ejecutivo ha agradecido al Senado que pidiera un informe a la Comisión de Venecia, que aunque pone en evidencia las carencias de la ley, Moncloa ha asumido como un logro. En ese sentido, Sánchez ha reivindicado la medida de gracia como una forma de "devolver a la política lo que nunca debió salir de la política".