En el PSOE descartan satisfacer el reclamo de feministas del partido que han pedido expulsar de la formación a los puteros. Aseguran que es algo difícil de llevar a cabo con garantías y apuestan por centrarse en impulsar la ley para abolir la prostitución que anunció Pedro Sánchez el fin de semana.
Fuentes del PSOE aseguran que, de sacar adelante esa ley, aquellos militantes y cargos que consuman prostitución estarían llevando a cabo un acto ilegal. Ahí, opinan, sí se podría defender su expulsión de las filas socialistas. De otra forma, es un asunto complicado.
Tal y como publicó EL ESPAÑOL, destacadas feministas del PSOE impulsaron el pasado 8-M una recogida de firmas para pedir a la formación que reformara su Código Ético para expulsar de la misma a los puteros. Argumentaban que si el partido es abolicionista, no podía contar con gente que se sepa que consume prostitución.
Entre las firmantes de la iniciativa se encuentran figuras como la exvicesecretaria general del partido, Adriana Lastra; la expresidenta andaluza, Susana Díaz; la exministra Matilde Fernández o la exconsejera de Estado Amelia Valcárcel.
Según apuntan las fuentes, para abrir un expediente de expulsión hace falta demostrar "hitos concretos y objetivos". "Siempre tienes que determinar el hecho fáctico en el que te basas", añaden, explicando que muchas veces es difícil demostrar si alguien ha consumido prostitución o no.
"Nosotros estamos centrados en la proposición de ley que anunció Sánchez. Así, si la aprobamos, no podemos tener en el partido a alguien que hace algo ilegal. Pero si no es así ¿cómo determinaríamos si están consumiendo prostitución o no lo están haciendo?", comentan.
El pasado sábado, Sánchez anunció en Bilbao, durante un acto conmemorativo del 20º aniversario de la victoria de José Luis Rodríguez Zapatero, que su Gobierno recuperaría una promesa que ha hecho más veces pero que nunca ha terminado de cuajar.
El presidente del Gobierno aseguró que "dentro de poco, el Grupo Parlamentario Socialista presentará una proposición de ley para hacer la abolición una realidad en nuestro país". Sin embargo, que salga adelante está muy lejos de ser una realidad, ya que hay muchos socios del Gobierno que rechazan la postura socialista del abolicionismo y se decantan por el regulacionismo.
Presentarla aunque caiga
Según explican desde el PSOE, todavía no hay una fecha concreta decidida sobre cuándo se presentará la proposición de ley. El partido se encuentra ahora mismo en la fase de sondear los apoyos con los que contaría. Sin embargo, explican que podrían presentarla aunque no cuenten con los números suficientes.
"Se puede ver incluso la oportunidad de llevar adelante la ley, aunque perdamos. No lo hemos decidido aún, pero es algo que ya ha pasado en otras ocasiones", comentan. Esto serviría para obligar a otras formaciones a retratarse y el PSOE vendería a su electorado –con amplia presencia de mujeres– que al menos lo han intentado.
El portavoz de Sumar y ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha subrayado este lunes que la medida parte del PSOE y no del Gobierno, y todavía no ha querido adelantar una postura ya que desconocen el texto de la norma que los socialistas quieren sacar adelante.
Sin embargo, dentro de Sumar conviven varias sensibilidades, con formaciones como Más País o Compromís en contra de abolir la prostitución. De hecho, el PSOE llevaba la abolición en su programa las pasadas elecciones generales y lo eliminó a la hora de firmar el pacto de Gobierno con Sumar.
Consultados por este diario, socios necesarios como Podemos, ERC o PNV se muestran cautos porque todavía no conocen qué en concreto pretende sacar adelante el PSOE, pero miran la propuesta con cierto escepticismo.
Desde el PNV piden una subcomisión parlamentaria que estudie la situación de la prostitución en España "antes de legislar en uno u otro sentido", algo que la formación ya solicitó el año pasado y que el PSOE rechazó.
En Podemos solicitan que, primero, habría que modificar la Ley de Extranjería, pero que aún es pronto para saber porque "los anuncios del PSOE pueden pasarse años en un cajón". ERC mantiene una postura parecida y pide no adelantar acontecimientos. Pero todas estas formaciones, en el pasado, ya se mostraron más proclives a regular la prostitución que a abolirla, por lo que el PSOE rema de momento en solitario.