El expresidente del Gobierno Felipe González ha ironizado este miércoles al decir que ahora "está de moda" gobernar usando los estados de ánimo, en una alusión implícita a Pedro Sánchez, y ha criticado además a aquellos que gobiernan a base de prorrogar "decretazos" y presupuestos.



"Nunca he hecho uso de los estados de ánimo, eso está de moda ahora", ha dicho en su intervención en un homenaje en Madrid al expresidente de la Comisión Europea Jacques Delors.



De esta forma ha hecho alusión de forma implícita al presidente del Gobierno y actual líder del PSOE, Pedro Sánchez, que recientemente decidió cancelar su agenda pública durante cinco días para meditar si seguía o no al frente del Ejecutivo tras la denuncia contra su mujer, Begoña Gómez.



Además, sin mencionar de nuevo a nadie en concreto, ha cargado contra aquellos que pretenden "gobernar a base de decretazos" y que aspiran a que les "prorroguen decretazos y presupuestos". "¡Qué bueno vivir de la mentira!", ha criticado.



Posteriormente, en declaraciones a los medios y preguntado sobre asuntos de política nacional, ha dicho que no tiene expectativas sobre las elecciones autonómicas en Cataluña este domingo y se ha limitado a comentar que "parece que los sondeos dan muy bien" al líder del PSC, Salvador Illa.

Agradecimiento a Feijóo

Y ha agradecido que el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, dijera recientemente que con Felipe González "no mandarían los separatistas en España". "Se lo agradezco a Feijóo", ha respondido el expresidente socialista preguntado al respecto.



En la charla previa que ha mantenido en el acto con Enrico Letta, exprimer ministro de Italia y presidente del Instituto Jacques Delors, González ha destacado que Delors fue un político con un "compromiso fuerte" y que no era "mercenario", ya que "si las cosas no salían (como deseaba) estaba dispuesto a dimitir". "Ahora si las cosas no salen, (los políticos) están dispuestos a que dimitan los otros", ha bromeado.



Por otro lado, ha alertado de que vivimos en una "sociedad en decadencia" y considera que Europa debe evitar seguir en este escenario, al tiempo que ha reclamado la necesidad de que la Unión Europea compita de forma global con Estados Unidos o China en asuntos como el 'big data'.



"(En la Unión Europea) tenemos capacidad para regular lo que hacen otros, pero para hacerlo no", ha lamentado.