España tiene un serio problema con los menores migrantes no acompañados, los llamados menas. No tanto por la cantidad, sino por la incapacidad del Gobierno central y los autonómicos de coordinar una respuesta. De hecho, ni siquiera hay unos datos y cada territorio echa sus propias cuentas.

La realidad es que hay notables diferencias entre territorios. EL ESPAÑOL ha preguntado a las consejerías del ramo de las 17 comunidades autónomas, más Ceuta y Melilla, para intentar ofrecer la imagen real de uno de los temas más polémicos de los últimos días.

Según los datos ofrecidos por las comunidades autónomas, Canarias es de lejos la que más menores migrantes acoge. Unos 5.500 jóvenes. Le siguen Cataluña, con 2.369, y la Comunidad de Madrid, con 1.200. En la parte baja de la tabla están La Rioja, que sólo acoge a 9; Castilla-La Mancha, con 84, y Asturias, con 89.

En la conferencia sectorial de Juventud e Infancia que se celebró el pasado miércoles en Tenerife, todas las comunidades autónomas –excepto Cataluña– llegaron a un acuerdo para repartir 347 menores de Canarias y Ceuta. La consecuencia fue que Vox rompió con el PP en seis comunidades, pero lo cierto es que el número de menores reubicados es casi insignificante.

El Gobierno central quiere reformar la Ley de Extranjería. El reparto actual es voluntario y el Ejecutivo intenta que pase a ser obligatorio. Sin embargo, el Ministerio del Interior no tiene ni idea de cuántos menores hay exactamente en cada comunidad.

El último informe de la Comisaría General de Extranjería y Fronteras asegura que en España hay un total de 13.600 menores migrantes no acompañados. Según los datos recavados por este diario de cada consejería, la cifra sería de 13.431. Si bien los datos se parecen, hay 169 vidas que están en un limbo.

Comunidad a comunidad

La comunidad autónoma más afectada por esta situación es Canarias. Esto se debe a que es frontera por África y recibe la mayoría de la inmigración clandestina que hay en su territorio por mar. Las autoridades de la isla estiman que al finalizar el verano la cifra de menas en Canarias podría ascender a los 11.000 jóvenes.

Las 10 comunidades autónomas que más menas acogen en la actualidad son, además de Canarias, Cataluña (2.369), Andalucía (740), País Vasco (723), Comunidad Valenciana (481), Islas Baleares (309), Ceuta (300) y Melilla (280).

Cataluña y País Vasco  son las que tradicionalmente han hecho un mayor esfuerzo para acoger menores migrantes, porque cuentan con más instalaciones de acogida. La Generalitat también atiende a un número elevado de personas que llegaron siendo niños y que ya superaron la mayoría de edad, 4.390 según sus últimos datos.

Este fue precisamente uno de los motivos esgrimidos por las autoridades catalanas para desvincularse del reparto pactado en la conferencia sectorial del pasado miércoles. Pero también hay un motivo político: el discurso anti inmigración está creciendo en el entorno independentista, con partidos como Junts o Aliança Catalana radicalizando sus posiciones.

En la conferencia de Tenerife, Andalucía pidió que si se reforma la Ley de Extranjería se tenga en cuenta su singularidad.

La consejera andaluza defendió que prácticamente cada semana llegan nuevos migrantes en embarcaciones a la costa, principalmente de Almería. Esto también influye en la complejidad de mantener las cifras actualizadas en los territorios fronterizos, ya que varían constantemente.

La presión que reciben Ceuta y Melilla por su propia situación geográfica es alta. Acogen a 300 y 280 menores migrantes actualmente y están en el octavo y noveno puesto, respectivamente. Sin embargo, son las primeras en el ranking si se tiene en cuenta el número de menores que acogen con respecto a su población. En tercer lugar está, de nuevo, Canarias.

La Comunidad de Madrid está en el tercer puesto de acogidas, con 1.200 menores en sus centros. El Gobierno de Isabel Díaz Ayuso ha criticado en numerosas ocasiones que el Ejecutivo central no actúa de manera eficaz para evitar que estas personas entren por Barajas.

Hay en todas estas cifras un hecho que llama la atención. A pesar de que las recepciones son voluntarias y el Gobierno de Pedro Sánchez está pidiendo un mayor esfuerzo a las comunidades, los territorios en los que gobierna el PSOE son de los que menos menores acogen.

Se trata de Navarra, que acoge 100; Asturias, 89; y Castilla-La Mancha, 84. Están en la parte inferior de la tabla, sólo superadas por La Rioja.

La reforma del Gobierno

La presión que está sufriendo Canarias y el agravio comparativo con respecto al resto de comunidades autónomas ha llevado al Gobierno isleño a llegar a un acuerdo con el Gobierno central para reformar la Ley de Extranjería. Ambos quieren cambiar el artículo 35 de la norma para hacer que la recepción sea obligatoria y no voluntaria.

Según la reforma planeada, Canarias debería derivar la atención de 3.000 de esos menores que acoge actualmente, casi la mitad. De aprobarse, el reparto se hará de manera escalonada en los próximos 12 meses a la entrada en vigor de la ley. Además, aquellos nuevos menores que lleguen, serían reubicados en los 15 días posteriores a su llegada.

Si bien hay algunas comunidades en las que el PP gobierna, como la propia Canarias, Ceuta y Melilla, que están a favor de la reforma, hay otras que muestran reticencias. Madrid, por ejemplo, considera que la reforma es inconstitucional al invadir competencias autonómicas.

La reforma fue explicada a las comunidades autónomas en la conferencia sectorial del pasado miércoles, pero no se sacó nada en claro. Como el Gobierno de Sánchez asegura no tener plan B, lo más previsible es que lleve la reforma al Congreso de los Diputados en las próximas dos semanas, obligando al PP a tomar postura.