Puigdemont ha vuelto a España siete años después de su huida. Del brazo del president del Parlament, Josep Rull, y ante unas 2.000 personas, ha logrado irrumpir en el acto de bienvenida organizado en el paseo Lluís Companys de Barcelona para arroparle en su regreso. No ha sido detenido y ha desaparecido tras un breve discurso sobre un escenario montado sólo para él. 

Los Mossos ya han activado la Operación Jaula para detenerle y han desplegado controles de tráfico en varias carreteras catalanas. En paradero desconocido, buscan un coche, del que conocen matrícula, modelo y color, en el que podría estar viajando para salir de España.

En sus primeras palabras, sobre un escenario con pantallas gigantes y un atril, Puigdemont ha instado a no renunciar a la autodeterminación de Cataluña por ser un derecho que pertenece a los pueblos y dejando claro que un referéndum "ni es ni será nunca un delito".

"Aunque les hemos visto su cara de represores, hoy he venido aquí para recordarles que aún estamos aquí", ha comenzado su discurso, parafraseando el "ya estoy aquí" de Josep Tarradellas en su retorno del exilio en 1977. 

"Hace siete años que nos persiguen por querer escuchar la voz del pueblo de Cataluña. Hace siete años que iniciaron una durísima represión que nos ha llevado a la cárcel y al exilio, que ha afectado a la vida de miles y miles de personas por el hecho de ser independentistas, a veces sólo por el hecho de hablar catalán, y han convertido el hecho de ser catalán en una cosa sospechosa", ha denunciado. 

VÍDEO | "Ahora estamos aquí": Puigdemont reaparece en Barcelona antes de la investidura de Illa; su discurso completo Edición: Jose Verdugo

Puigdemont ha aparecido andando por la calle Trafalgar, acompañado no sólo por Josep Rull, también por otros líderes de su partido como Jordi Turull, Laura Borràs, Artur Mas o Quim Torra. Se deconoce cómo ha llegado Puigdemont a la ciudad condal. 

El expresident se ha abierto paso entre sus seguidores hasta el escenario instalado frente al Arco de Triunfo, entre vítores y gritos de "presidente" e "independencia" de los miles de asistentes al acto, muchos de ellos con caretas con su cara, esteladas y camisetas de la Diada. 

En esos siete años, ha dicho, "la represión ha hecho muchos estragos y los continuará haciendo mientras no se detenga la politización de la justicia, mientras cuatro jueces manden más que un Parlamento, mientras se permita al PP controlar la Sala Segunda del Tribunal Supremo por la puerta de atrás y mientras se permita que Vox ejerza de acusación popular para perseguir a disidentes".

"Pero a pesar de sus esfuerzos, a pesar de que nos han querido hacer mucho daño, pese a que les hemos visto su cara de represores, hoy he venido aquí para recordarles que aún estamos aquí, porque no tenemos derecho a renunciar", ha afirmado.

"No sé cuándo nos volveremos a ver"

Según Puigdemont, "el derecho a la autodeterminación pertenece a los pueblos", por lo que "nadie desde la política tiene derecho a renunciar a un derecho que es colectivo".



"Hoy muchos piensan festejar que yo sea detenido y pensarán que el escarnio nos disuadirá, que por escarmentar vale la pena incumplir incluso una ley aprobada por su Parlamento. Pero se equivocan. Y en su error arrastrarán una vez más la credibilidad de la democracia española, aunque sabemos que esto les importa muy poco", ha proseguido. 

Según Puigdemont, "ni es, ni era, ni será nunca un delito hacer un referéndum y obedecer el mandato del Parlamento de Cataluña", en alusión al referéndum unilateral del 1 de octubre de 2017.



"De aquella victoria, surgió una represión feroz, que ha ido interfiriendo en nuestras vidas y en nuestras instituciones", ha recalcado Puigdemont, que ha señalado que la ley de amnistía debía servir para "devolver a la política lo que nunca debería haberse ido de la política, pero a unos cuantos señores del Supremo esto no les gusta ni les conviene".



Puigdemont ha sentenciado: "En un país donde las leyes de amnistía no amnistían no nos interesa estar. Tienen un problema de naturaleza democrática".

Y ha terminado así su intervención con un mensaje que posteriormente cobraba sentido:"No sé cuando nos volveremos a ver. Pase lo que pase, que cuando nos volvamos a ver, que podamos acabar con el grito de que yo acabara mi discurso: ¡Visca Catalunya lliure!".

Puigdemont desaparece

Tras su discurso emprendió una marcha hacia el Parlament acompañado de los representantes de las entidades independentistas y de dirigentes de Junts, que le han hecho una especie de escudo humano para evitar que fuera detenido por los Mossos. 

Minutos después, ha desaparecido de dicha comitiva y se desconoce dónde está. ¿Qué puede significar esto? Hay tres teorías: que se va a entregar, que ha encontrado una manera de entrar en el Parlament o que vuelve a irse al exilio.

El núcleo duro de Puigdemont, entre ellos Gonzalo Boye, Josep María Matamala, Josep Lluís Alay y Jordi Cabré, ya está dentro del Parlament y ha pasado los controles de los Mossos. Su escaño en el Parlament está vacío. 

Los Mossos ya han activado la Operación Jaula para detenerle. De hecho, han cerrado todas las salidas por carretera de Barcelona y buscan una matrícula de un coche en concreto, ya que en él podría estar viajando Puigdemont para volver a huir.