Un Congreso revuelto: Ábalos rompe con el PSOE, el PNV vota con el PP y Vox no rechaza el cupo catalán

El Congreso de los Diputados ha aprobado este miércoles una propuesta del PP para que el Gobierno de España reconozca al líder opositor en Venezuela, Edmundo González, como presidente legítimo del país y ganador de las elecciones. PP, Vox, PNV, Coalición Canaria y UPN han apoyado el trámite, con lo que se quiebra una vez más el bloque de Pedro Sánchez. En total, 177 votos a favor, uno por encima de la absoluta.

Paradójicamente, es la primera vez en toda la legislatura que el Congreso se divide por ideologías. La derecha a favor de la moción, la izquierda en contra y, en medio, Junts y José Luis Ábalos, a favor de sí mismos y en contra de todos los demás.

Los diputados teledirigidos desde Bruselas siguen demostrando que pueden ser imprevisibles. A las 13.00 horas, antes de empezar las votaciones, abandonaron el Hemiciclo y volvieron a Barcelona a participar en una Diada que, a la vista de sus cifras de asistencia, estaba necesitada de siete manifestantes más.

Si la de Junts fue una ausencia por sorpresa, la de José Luis Ábalos lleva anunciándose demasiado tiempo. El diputado del Grupo Mixto, expedientado del PSOE y perseguido por sus antiguos compañeros del Consejo de Ministros, dijo hace dos semanas a este periódico que dejaría de ser "tan seguidista" con Pedro Sánchez y que, a partir de ahora, votaría "en conciencia" y no en función de las siglas.

El motivo no es otro que la auditoría interna del Ministerio de Transportes para investigar el caso Koldo, en la que queda especialmente señalado. Con su abstención, el que fuera secretario de Organización del PSOE lanza un mensaje muy claro a quienes le dieron la espalda: su voto no está ni mucho menos asegurado.

No es el único que ha enviado el mismo recado.

El ejemplo más claro ocurrió en la votación siguiente. Hablando claro: Vox se abstiene e impide que el Congreso apruebe una moción contra el concierto catalán. El motivo oficial, alegan desde la formación, fue que querían enmendar el texto del PP y proponer un modelo equitativo entre comunidades autónomas, pero los populares se negaron. 

Por último está el PNV, socio preferente desde la moción de censura de 2018, que ha roto por primera vez con el Gobierno en un tema especialmente sensible para su dirección como es el de Venezuela. Principalmente, porque es el único partido del bloque de investidura que censura abiertamente el chavismo.

A pesar de su "traición", la intervención de los jeltzales volvió a ser de las pocas que se escaparon a la orquesta sinfónica de gritos, silbidos y golpetazos en la que últimamente se ha convertido el Congreso de los Diputados. Un coro tan estridente que naturaliza episodios como que el popular Jaime de Olano diga que "el modelo de Sánchez es Franco" o que el ministro de Justicia, Félix Bolaños, se enzarce con Miguel Tellado sobre quién de los dos necesita ir más a la peluquería. 

Nuevo curso político: 2024/2025.