El Partido Popular se niega a apoyar al Gobierno en su plan de control a los medios. Fuentes de la formación de Alberto Núñez Feijóo aseguran que el PP no apoyará "ningún planteamiento del Gobierno que se base en controlar a los medios de comunicación".
La Moncloa alega que su iniciativa "nace de la Constitución" y del reciente Reglamento de Libertad de Medios de Comunicación aprobada por la UE. Lo cierto es que este texto, que ya está en vigor y no hace falta trasponer, pretende proteger a los medios de los abusos del poder político. Y en el PP, temen que el Gobierno quiera sobrelegislar con "esa percha" y aprovechar para "acosar" a medios que "publican temas y asuntos que incomodan al presidente Sánchez".
La idea inicial que anunció el propio Sánchez después de sus cinco días de reflexión en abril -que él mismo anunció por una carta a la ciudadanía justificándola en el "acoso de seudomedios y bulos de asociaciones de extrema derecha"- es que la nueva legislación pretende dotar de "más transparencia" a la propiedad de los medios. Y evitar que haya "tabloides digitales" con subvenciones públicas -de gobiernos autonómicos del PP- que los sustenten.
Para los populares, resulta "llamativo que Sánchez impulse su propuesta precisamente tras la investigación judicial contra su esposa", Begoña Gómez, imputada por corrupción y tráfico de influencias, "y cuando los casos de corrupción salpican directamente a parte de su Gobierno y su partido".
El PP recuerda que, a diferencia de las directivas, los reglamentos europeos entran en vigor en el momento de su publicación. Y si Sánchez quiere aplicar las medidas de transparencia que establece la UE, debería empezar por explicar los motivos que le llevaron a designar a Cascajosa, militante del PSOE, como presidenta de RTVE, por ejemplo.
"Pedro Sánchez ya controla con dirigentes de obediencia debida RTVE y la agencia Efe", con el ex secretario de Estado de Comunicación de su primer Gobierno, Miguel Angel Oliver, tal como recuerdan las citadas fuentes de Génova. Y éstas son solo dos de la "buena parte de las instituciones del Estado que ya ha colonizado".
A la vuelta de su reflexión, Sánchez anunció no solo medidas de control a los medios, sino también a la Justicia. Pero lo cierto es que pocas semanas después el PP y el Gobierno llegaron a un acuerdo para la reforma y renovación del CGPJ. Desde entonces, tal como publicó este diario, Moncloa ha bajado el pistón y advierte de que su "plan de regeneración democrática" se centrará solo en la prensa y su relación con el poder.
"La vocación de Moncloa para ampliar su control a los medios de comunicación también privados", dice el PP, lo acerca a los métodos de Nicolás Maduro en Venezuela.
"Es preocupante" la actitud de Sánchez "y se asemeja más a lo que hacen países a los que este Gobierno tiene alergia de calificar como dictaduras", apuntan las fuentes del PP.
Para los de Feijóo esto no es más que una "cortina de humo con la que pretendía distraer a la opinión pública" y que ahora "quiere convertirla en ley". Algo que, "desde luego, no será con el apoyo del PP".
No tendría sentido que los populares vayan a apoyar medidas de control a los medios que, además, Sánchez pretende vincular a las autonomías del PP y al "fango político". Porque ese reglamento no lo precisa, y porque "Sánchez no es quien para repartir licencias de medios de comunicación ni carnés de buen periodista en función de lo que escriban o digan sobre su persona".
El problema con la regeneración, concluye el PP, "no la tiene en ningún caso la democracia española, sino el partido de Sánchez, el Gobierno de Sánchez y Sánchez mismo".