La guerra abierta entre el Gobierno central y el valenciano a causa de la gestión de la crisis de la DANA, que deja ya más de 200 fallecidos, entró este fin de semana en un nuevo escenario político. Los cruces y reproches, hasta ahora transmitidos a los periodistas a través de fuentes extraoficiales, ahora son públicos y lanzados desde ruedas de prensa o comunicados oficiales.
La última batalla política del "y tú más" a raíz de la devastadora riada ha tenido como protagonistas este lunes a Carlos Mazón, a la Unidad Militar de Emergencias (UME) y a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ). Todo a raíz de la entrevista del presidente de la Generalitat Valenciana en Cope.
En ella, Mazón ha indicado que la CHJ, que depende del Ministerio de Transición Ecológica, desactivó tres veces la alerta de peligro de desbordamientos el pasado martes (a las 13, a las 14 y a las 16 horas), y ha afirmado que el mensaje de aviso a la población se envió media hora después de que se les trasladara esa alerta.
La Confederación Hidrográfica del Júcar ha salido al paso para desmentir a Mazón a través de un comunicado. En él, el organismo público señala que "entre sus competencias no está la de emitir las alertas públicas en materia hidrológica" por riesgo de crecidas sino que éstas "corresponden a los servicios de emergencias coordinados por las comunidades autónomas".
"Las confederaciones hidrográficas cuentan con una red automática de información hidrológica (SAIH) que permite monitorizar caudales permanentemente para que las autoridades de emergencias valoren la afección concreta sobre el territorio y determinen actuaciones para prevenir daños", aclara la nota de prensa del Ministerio de Transición Ecológica.
La UME
Durante su entrevista, Mazón también se ha referido a la UME y ha asegurado que el martes 29 de octubre a las 15:21 horas, es decir, antes de la "revolución meteorológica", pidió al Gobierno desplegarla y dice que reclamó "toda la ayuda posible".
"El máximo mando de la UME tiene que tener capacidad de llamar a Torrejón y que vengan más" efectivos. "Porque no lo pide el presidente de la Generalitat", ha recalcado. "Desde el momento en el que a las 15.21 se activa la UME ya no hay ninguna otra necesidad de petición política".
Horas más tarde, el jefe de la UME, el teniente general Javier Marcos, ha comparecido en rueda de prensa desde Moncloa y ha apuntado a la responsabilidad autonómica de la Generalitat Valenciana para que sus soldados pudieran intervenir en las zonas afectadas por la DANA.
Marcos ha explicado que sus militares no podían entrar en la zona de emergencia sin la autorización del órgano competente de la comunidad autónoma dado el nivel 2 de emergencia.
"Yo puedo tener mil soldados en la puerta de la emergencia, pero no puedo entrar legalmente hasta que el director de la emergencia me autoriza", ha dicho el jefe de la UME, que ha reconocido que su unidad no intervino rápidamente.
Al respecto, el teniente coronel ha argumentado que no se intervino rápidamente porque la metereología lo impidió y, en segundo lugar, por una cuestión "de orden y disciplina": "No podemos añadir caos a lo que es una situación absolutamente caótica".
"En una situación de emergencia la comunidad autónoma es responsable de la dirección, quien dirige la emergencia es la comunidad autónoma, quien decide dónde vamos o dónde no vamos es la comunidad autónoma. A partir de ahí, como unidad militar, empezamos a actuar".
La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha respaldado a la UME y ha mostrado su malestar con Mazón por afirmar que el despliegue del Ejército es responsabilidad de los mandos de este cuerpo. "Que se dedique a coordinar adecuadamente", le ha emplazado Robles al presidente de la Generalitat Valenciana.