El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, habla con el secretario de Estado para las relaciones con las Cortes, Rafael Simancas.

El ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, habla con el secretario de Estado para las relaciones con las Cortes, Rafael Simancas. Efe

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El Gobierno bloquea el trámite que suspende el impuesto del 7% a la producción eléctrica tras el pacto de Junts y PP

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El PSOE y Sumar, ambos partidos del Gobierno de coalición, están bloqueando el trámite parlamentario que llevaría a suspender el impuesto del 7% a la producción eléctrica. La medida fue pactada este lunes entre Junts y el PP en una comisión del Congreso de los Diputados y obtuvo el apoyo de Vox, ERC y PNV, estos dos últimos socios del Ejecutivo.

Según fuentes parlamentarias, los dos partidos han suspendido sin plazo fijo la reunión de la Comisión de Transición Ecológica donde se está tramitando y que se tendría que celebrar este jueves. Así los partidos del Gobierno ganan tiempo para estudiar fórmulas que impidan que la suspensión del impuesto acabe viendo la luz.

La persona encargada de estudiar las múltiples vías posibles para dejar sin efecto la enmienda pactada por PP y Junts, que fuentes del PSOE aseguran que son muchas, es el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas.

Este nuevo frente problemático para el Gobierno se desató este lunes, durante la reunión de la comisión, cuando PP y Junts pactaron incorporar la suspensión de este impuesto en la ponencia del Proyecto de Ley por el que se regula el régimen del comercio de derechos de emisión de gases de efecto invernadero.

Actualmente, este tributo está fijado en el 7% y con esta enmienda pasaría al tipo 0, siempre y cuando no haya déficit de tarifa

El Gobierno pretendía frenar estas medidas usando su capacidad de veto para aquellas iniciativas que considera que pueden provocar una pérdida sustancial de ingresos para el Estado. Hacienda calcula que, de decaer el impuesto, se dejarían de ingresar 1.500 millones de euros.

Sin embargo, el Gobierno no pudo vetar estas enmiendas porque uno de los dos diputados socialistas miembros de la Mesa de la comisión se ausentó durante la ponencia. Esto hizo que la votación quedara en empate a dos y el veto no pudiera entrar en vigor.

Según explican las fuentes parlamentarias, la fórmula que más peso está cogiendo para intentar revertir la situación es la de plantear un voto particular. Esto permitiría que se eliminen enmiendas que se han introducido durante el trámite, pero obligaría a ERC o PNV a cambiar de opinión. El reglamento permite que el Ejecutivo vete "en cualquier momento" de la tramitación enmiendas como estas.

Este lunes, el Gobierno hizo un primer intento de vetar la congelación del impuesto, que el PP calcula que supondrá cerca de 400 millones de euros de ahorro para los hogares.