Albares celebra "la paz" en Gaza desde Beirut: "Siempre pedimos una voz euroárabe unida para la solución de los dos Estados"
La política exterior española, muy beligerante con la "guerra indiscriminada de Netanyahu", le ha valido una crisis diplomática con Israel, pero le ha dado un papel relevante como aliada de facto del mundo árabe y vía de 'entrada' a Irán.
Más información: Israel y Hamás alcanzan un acuerdo de alto el fuego en Gaza tras 15 meses de guerra.
Después de quince meses de guerra, la noticia "más esperada" por José Manuel Albares le ha pillado en Oriente Próximo, en pleno viaje a Líbano y Siria para "apuntalar las esperanzas de paz" en la región. "Llevamos meses pidiendo una voz euroárabe conjunta que genere el marco que posibilite una conferencia de paz para avanzar a la solución de los dos Estados", ha señalado este miércoles desde Beirut.
"Queda muchos desafíos y hay que ser muy prudentes", ha remarcado Albares en una primera valoración de "la esperanzadora noticia". Pero ha insistido en que nuestro país venia reclamando "alto y fuerte" este alto el fuego muchos meses, y es "una oportunidad que España va a acompañar con todas sus fuerzas".
No en vano, Albares anunció que, tras varios contactos con Pedro Sánchez a lo largo del día, el Gobierno ya tiene preparado un paquete de ayuda humanitaria de 24 millones de euros que puede alcanzar los 50 millones muy rápidamente para hacer frente a las necesidades más básicas de la población de Gaza".
El ministro de Asuntos Exteriores viajaba este miércoles a Líbano, "a pocos días de que se cumplan los dos meses de alto el fuego" acordado entre Israel y el otro proxy de Irán en la región, la milicia chií libanesa de Hezbolá. "Lo que queremos ahora es que ambos alto el fuego se conviertan en permanentes". El jueves saltará a Siria, pocas semanas después de la caída sorpresiva del régimen de Bachar Asad, otro aliado de los ayatolás.
"Más de 45.000 palestinos muertos y casi 2.000 israelíes muertos son suficientes", ha remarcado en una comparecencia ante los periodistas que le acompañan en esta minigira. "Ha llegado el momento de encarar las relaciones en Oriente Próximo de otra manera, tanto en Gaza y como en Líbano".
"Uno de los pilares principales de la política exterior española es la búsqueda de la paz", insistía Albares, al anunciar un programa de ayuda al ejército libanés "para que se despliegue en todo el territorio del país".
Así, espera que el ejército pueda tomar las regiones hasta ahora en manos de los terroristas y así "garantizar la estabilidad del país y la paz con los israelíes, lo cual redundará en la paz para toda la región". Para ello, incluso, no sólo ha comprometido 20 millones de euros en ayuda militar y de cooperación a Líbano, y está dispuesto a reforzar la preesencia de tropas españolas en la región.
15 meses de guerra
El año largo de guerra, desde el 7-O, comenzó con la peor masacre de judíos desde el Holocausto (ese 7 de octubre de 2023) y continuó con una respuesta tan brutal como efectiva de Israel contra el grupo terrorista Hamás y los palestinos en la Franja de Gaza. Los kibutzim y parte de las localidades del sur quedaron devastados y, desde el norte, Hezbolá hostigó con cohetes y misiles mientras preparaba una incursión similar. Casi 100.000 israelíes huyeron de la frontera libanesa.
Ahora, tras arrasar Gaza y eliminar el régimen terrorista en la franja, causando decenas de miles de muertes, y después de varias acciones quirúrgicas contra la cúpula de Hezbolá, bombardeos selectivos y una incursión en el sur del Líbano, las treguas están llegando a la vez que España va tomando voz en la región.
"Desde el principio, España condenó los ataques de Hamás, exigió la liberación de los secuestrados, pidió la entrada de ayuda humanitaria en Gaza y exigió un alto el fuego inmediato a Israel", recuerda Albares desde Beirut. "Desde el principio dijimos que la única solución es la de los dos Estados, con una Palestina y un Israel conviviendo como vecinos en paz y seguridad [...] y que para eso lo primero era parar la guerra".
Albares ha llegado a condenar expresamente a Jerusalén por sus bombardeos "sin sentido ni objetivo militar o estratégico alguno" en la franja, dando por buenas las cifras de hasta 46.000 muertes del ministerio gazatí de salud, controlado por Hamás.
También calificó de "atentado a contra el derecho internacional" los ataques "deliberados" del ejército israelí contra los cuarteles de los cascos azules de Finul en el sur del Líbano. Su general en jefe, el español Aroldo Lázaro, también se reunió con el ministro español en Beirut. Juntos repasaron los meses de guerra cruzada sobre sus cabezas y con los casi 700 soldados españoles refugiados en sus búnkeres.
Crisis con Israel
La actitud española, muy beligerante con la "guerra indiscriminada de Netanyahu contra los palestinos" le ha valido una crisis creciente con Jerusalén, que llegó a retirar a su embajadora en España hace meses.
Pero Albares ha logrado abrir un hueco para España en la región, muy apreciado por sus aliados, dada su alianza de facto con muchos países árabes. El ministro español se ha reunido dos veces con su homólogo iraní en los últimos meses, también con el ministro turco, ha impulsado la creación del G5+ con Alemania, Francia, Italia, Polonia y Reino Unido y ahora, la paz llega con él visitando la región.
Este miércoles, el ministro español se ha entrevistado con el nuevo presidente libanés, con los primeros ministros saliente y entrante, con el presidente del Parlamento, con el ministro de Sanidad y con el de Exteriores. Este viernes, visitará Damasco para izar la bandera de la embajada de España 13 años después, y para reunirse con el titular de Exteriores, Assaad Hassan al Shibani, y el nuevo gobernante del país, Ahmed al-Sharaa.
Albares es el cuarto ministro europeo en visitar Damasco, después del viaje conjunto de los jefes de la diplomacia alemana y francesa, hace 10 días, y del ministro italiano, el viernes pasado. Todos ellos, miembros del G5+, han mandado el mismo mensaje: que la comunidad occidental está dispuesta a ayudar a la reconstrucción del país si la nueva administración garantiza una Siria inclusiva con las minorías étnicas y religiosas, unida, soberana y sin injerencias extranjeras (ni de Irán ni de Rusia).
Este nuevo grupo informal de países trata de impulsar una Europa de la Defensa y se ha reunido ya en dos ocasiones, para centrar sus esfuerzos en Ucrania y a Oriente Próximo, "las dos guerras que cercan Europa y en las que tanto nos jugamos", en palabras de Albares.
La noticia del alto el fuego entre el Gobierno de Benjamin Netanyahu y Hamás llega, pues, en un momento clave, a pocos días de la toma de posesión de Donald Trump en Estados Unidos y cuando se rumorean nuevos acercamientos de Israel con Arabia Saudí, en los llamados Acuerdos de Abraham. Y con España jugando un papel decisivo en la región, gracias a su entrada privilegiada con Teherán y sus especiales relaciones con los países árabes. Incluso a pesar de la crisis diplomática con Israel.