Reyes Maroto, exministra de Industria, en la comisión de investigación del Senado.

Reyes Maroto, exministra de Industria, en la comisión de investigación del Senado. Ricardo Rubio Europa Press

Política COMISIÓN DE INVESTIGACIÓN

Reyes Maroto no recuerda cómo le contactó Aldama, no sabe si le conoce, pero admite que pueden salir más whatsapps

La entonces ministra de Industria ha declarado en la comisión de investigación del Senado que no recuerda haber conocido personalmente a Aldama y que no sabe cómo el comisionista consiguió su número.

D. Ramírez
Publicada

Reyes Maroto ha asegurado en la comisión de control del Senado sobre el 'caso Koldo' que no recuerda si conoció personalmente a Víctor de Aldama, pero al mismo tiempo ha admitido que pueden filtrarse más whatsapps intercambiados entre ambos.

Ha sido, de hecho, un mensaje el que ha centralizado el interrogatorio de los senadores a la entonces ministra de Industria y hoy líder del PSOE en la ciudad de Madrid. Se lo envió ella a Aldama en los días de la trama y decía así: "Buenos días, Víctor, y disculpa el retraso. Son días complicados en mi ministerio. Le he pasado tu contacto al nuevo director de Turespaña para que se ponga en contacto contigo".

Los portavoces de los partidos de la oposición han ido, uno tras otro, percutiendo en las mismas cuestiones: ¿conoció usted a Aldama? ¿Existen más mensajes aparte de ese? ¿Por qué tenía su teléfono? ¿Quién les puso en contacto?

Maroto ha reaccionado diciendo que han pasado cuatro años y que no recuerda los detalles. Además, ha asegurado desconocer quién le dio su número de teléfono al comisionista. Sin embargo, ha admitido que puede que aparezcan más whatsapps entre ella y Aldama.

El contexto aportado por Maroto a esos contactos ha sido el siguiente: en plena pandemia, eran muchos los empresarios que se ponían en contacto con el Ministerio de Industria para explorar distintos proyectos que crearan empleo y relanzaran la maltrecha economía española. Así, Aldama ofreció a Maroto y su equipo –ella lo derivó a Turespaña– "un concierto" que se habría celebrado en Madrid. "No lo vimos idóneo y lo rechazamos", ha zanjado.

Maroto ha despejado la pelota una y otra vez cuando le han preguntado por la existencia de más mensajes hasta que no le ha quedado más remedio que hablar de "contactos". En plural.

Otro de los nombres que más ha aparecido en el interrogatorio ha sido el de Juan Ignacio Bidart, entonces jefe de gabinete de Maroto. La exminitra lo ha definido como alguien de su plena confianza. Sin embargo, ha dicho que no estuvo al tanto de la reunión entre éste y algunos empresarios vinculadas a la trama, que se celebró en dependencias ministeriales. Participó, por ejemplo, Claudio Rivas, líder del fraude de los hidrocarburos, actualmente encarcelado.

Los portavoces de la oposición han cargado contra Maroto por la poca verosimilitud que les merecen dos hechos: que Aldama hablara en esa clave con ella sin conocerla; y que su jefe de gabinete tuviera una reunión de ese cariz sin avisarla.

Maroto ha esquivado otra pregunta clave –en la comisión no se puede mentir–: ¿no ha intentado hacer memoria o releer mensajes con Aldama después de que haya saltado la trama a la palestra mediática?

La exministra, al poco de estallar el caso, acusó a Aldama de sembrar la sombra de la corrupción sobre el Gobierno sin aportar "pruebas creíbles". Poco después, apareció en los medios el mensaje que ella le envió.

"Todos mis contactos se refieren a un proyecto turístico que no salió adelante", ha reiterado Maroto. También ha aseverado que ni Ábalos ni Koldo mediaron para que conociera o hablara con Aldama: "No sé cómo consiguió mi número".