El banquero Jaime Botín, tío de Ana Patricia Botín, está a un paso de sentarse en el banquillo de los acusados por un delito de contrabando por sacar de España la obra Cabeza de mujer joven, de Pablo Picasso. Lo sacó por mar, a través de un velero de su propiedad, con destino a Suiza donde lo iba a vender a pesar de que la Audiencia Nacional se lo había prohibido y había declarado la obra “inexportable”.

El juez número 1 de Primera Instancia de Pozuelo de Alarcón, Enrique Presa, ha cerrado la instrucción que comenzó en el año 2015 y por lo que Botín fue imputado, tal y como adelantó EL ESPAÑOL. Ahora, el magistrado considera que el expresidente de Bankinter debe ser juzgado por un delito de contrabando. El investigado puede recurrir el auto de transformación en procedimiento abreviado.







"Caso omiso a la prohibición"







Según explica el juez en su resolución judicial, “estando vigente la prohibición administrativa de exportación, Botín hace caso omiso a la prohibición pues el 31 de julio de 2015 la Guardia Civil tiene noticia de que el cuadro ha sido localizado por el Servicio de Aduanas francés a bordo del buque Adix, atracado en el puerto el Clavi, Córcega (Francia), con destino a Suiza”.

La Guardia Civil sabía de las intenciones de Botín de subastar la obra a través de la casa Christies a pesar de que la Audiencia Nacional le había prohibido la salida de la obra fuera de España al ser arte del patrimonio español y ser una obra única de un periodo de Picasso.

Durante la instrucción, se tomó declaración a varios amigos de Botín, quienes aseguraron “haber visto el cuadro (en el velero) durante sus estancias veraniegas en años anteriores, aunque uno de ellos también lo ha visto en territorio español”.



















Botín siempre alegó que el cuadro nunca estuvo en España y por tanto no le puede prohibir sacarlo del país. Su planteamiento es que siempre estuvo el velero, que no tiene bandera española y aunque estuvo atracado durante tiempo en Valencia, se rige por la bandera del buque.

Su argumento no ha sido aceptado por el juez, que además tiene otras pruebas de que sí estuvo en España, concretamente en su domicilio de Pozuelo de Alarcón (Madrid). Después de que las autoridades francesas alertaran a la Guardia Civil del destino del velero de Botín, los agentes incautaron el cuadro, que actualmente se encuentra depositado en el Museo Nacional de Arte Reina Sofía.