Esta es la Ley de Transitoriedad Jurídica y Fundacional de la República presentada por Junts pel Sí y la CUP de cara al referéndum del 1 de octubre en Cataluña. La futura “República de Cataluña” reconocería la doble nacionalidad, la cooficialidad de las lenguas catalana y castellana y la amnistía de los condenados por haber participado en la construcción del nuevo Estado catalán. Además, reconoce al presidente de la Generalitat como jefe del Estado, prevé la expulsión del Ejército español y remite a leyes posteriores la toma de puertos y aeropuertos.
La ley de transitoriedad tiene 89 artículos, tres disposiciones finales, una de ellas suspensiva si no gana el sí en esta votación. Según la propuesta de los secesionistas, la soberanía nacional recaería en el pueblo de Cataluña y, mientras no se apruebe la Constitución catalana, la ley de transitoriedad ejerce como norma suprema.