Después de que el Parlament de Cataluña proclamase la República catalana, algunos ciudadanos han comenzado a mostrar su rechazo por España de una forma que roza el surrealismo: rompiendo y quemando sus documentos de identidad.
Un vecino de Figueras (Gerona) no ha tardado en colgar en su perfil de Twitter una foto de su DNI cortado a tijera con el mensaje: "¡Adiós Reino de España!", "¡Hola República catalana!" un mensaje que pronto le han reprochado miles de seguidores.
Otro tuitero ha colocado su pasaporte español en una sartén sobre una vitrocerámica y lo ha quemado como si se tratara de un filete. Son hechos aislados, pero dan cuenta de la euforia transitoria en la que algunos independentistas han entrado para aplaudir la votación ilegal de los parlamentarios secesionistas.
Si no se trata de actuaciones simbólicas, estos ciudadanos han perdido los únicos documentos que les permiten identificarse y viajar a cualquier lugar, puesto que Cataluña no es un Estado. La aprobación de la República independiente en el Parlament no tiene ninguna validez jurídica y, de hecho, ningún país europeo ha respaldado la DUI. Pero estos hechos son una muestra de la confusión a la que la actuación del equipo de Puigdemont y del sector independentista del Parlamento ha llevado a parte de los ciudadanos catalanes.
RETIRADA DE BANDERAS
No ha sido el único gesto contra el Estado español que se ha visto esta tarde en Cataluña. Se han retirado banderas en los principales edificios, entre ellos el Parlament y algunos ayuntamientos, como los de Gerona o Sabadell (Barcelona).
En Gerona, la ciudad donde Puigdemont fue alcalde antes de aspirar a la presidencia del Govern, cientos de ciudadanos se han plantado frente al edificio consistorial pidiendo la retirada de la bandera española mientras tenía lugar el pleno del Parlamento. Después de proclamarse la República catalana, cuando por fin un grupo de personas ha retirada la bandera, la gente ha aplaudido entre gritos de "¡Independencia!". La multitud se ha desplazado hacia la subdelegación del Gobierno en la ciudad, donde también han quitado la enseña nacional.
En Sabadell (Barcelona) también se han vivido momentos de tensión. Allí, los independentistas no solo han quitado la bandera española, sino también la europea, dejando dos mástiles desnudos sobre el edificio. La plataforma Crida per Sabadell, en la que se integra la CUP de la ciudad barcelonesa, forma parte de Crida per la Democracia, una de las organizaciones que llamó a la participación de los catalanes en la votación ilegal del 1 de octubre.
Sabadell es una de las ciudades donde se ha dado mayor división entre la población por la independencia de Cataluña. No es la primera vez que allí se viven situaciones que rozan el ridículo a cuenta de la cuestión catalana. Precisamente Crida per Sabadell fue también la impulsora de la iniciativa para retirar el nombre del poeta Antonio Machado de una plaza por considerarle "hostil a la lengua, cultura y nación catalanas". El alcalde de la ciudad, Maties Serracant, finalmente no aprobó la moción.