La Audiencia de Barcelona ha condenado a 9 años y ocho meses de cárcel a Felix Millet, siete años y medio a Jordi Montull y cuatro años y cinco meses al extesorero de CDC Daniel Osàcar por enriquecerse a través del Palau de la Música y por el cobro de 'mordidas' con las que el partido catalán se financió ilegalmente.
Las penas para los principales acusados son muy inferiores a las que solicitaba la Fiscalía, que reclamó 14 años de cárcel para Millet, 10 años y 10 meses para Montull y ocho para Osàcar. El tribunal ha aplicado de forma cualificada la circunstancia atenuante de dilación del proceso, que comenzó hace ocho años y medio. A Millet y Montull se les ha reconocido, además, las atenuantes de confesión y disminución del daño.
La confesión de los hechos realizada por Millet y Montull no ha servido para que la hija del segundo, Gemma Montull, eluda la prisión. La Audiencia la ha condenado a cuatro años de prisión y no a los dos años a los que rebajó sus pretensiones condenatorias el Ministerio Público.
La Sección Décima de la Audiencia de Barcelona, presidida por Montserrat Comas, ha dado a conocer este lunes la sentencia, de 546 páginas, de la que ha sido ponente el magistrado Julio Hernández. Los delitos por los que ha recaído condena son malversación, apropiación indebida, falsedad documental y contable, tráfico de influencias, blanqueo de capitales y contra la Hacienda Pública.
La resolución, contra la que cabe recurrir ante el Tribunal Supremo, declara probada la financiación ilegal de Convergencia Democrática de Cataluña (hoy, Partido Democrático de Cataluña) señalando que los directivos del Palau Millet y Montull mediaron "para el establecimiento, mantenimiento y funcionamiento de un sistema por el cual la sociedad Ferrovial-Agroman, mediante el pago de comisiones a CDC, obtenía la adjudicación de determinados concursos y licitación para la construcción de
obra pública en Cataluña, concursos que eran promovidos por entidades autonómicas o locales cuyos gobiernos estaban conformados o regidos por miembros" de ese partido.
Millet y Montull, afirma el tribunal, pactaron con el entonces tesorero de Convergència Carles Torrent, fallecido en 2005, que Ferrovial entregaría dinero a CDC a cambio de que ésta garantizase la adjudicación de un determinado volumen económico de obra pública de forma anual.
Personas "no identificadas"
El tribunal, que no excluye la participación en el entramado de financiación ilegal de otras personas de Convergencia "que no han podido ser completamente identificadas", señala que Millet y Montull pusieron a disposición de los directivos de Ferrovial y miembros de CDC toda la estructura económica del Palau de la Música para que estos pudieran ocultar el pago y cobro, respectivamente, de las comisiones bajo la forma de patrocinio los primeros y bajo la de convenios de colaboración y pago de facturas por servicios no prestados para el Palau los segundos”.
La comisión que pactaron Ferrovial y CDC era del 4% del importe del total de las adjudicaciones obtenidas. La cantidad se repartiría entre CDC (2,5%) y Millet y Montull (1’5%).
Según la sentencia, "este acuerdo criminal se mantuvo ininterrumpidamente desde antes del año 1999 hasta el 2009, cesando a raíz de la entrada y registro" del Palau tras el inicio de la investigación penal.
Comisiones por 6,6 millones
Durante ese período las comisiones entregadas por Ferrovial a CDC ascendieron "como mínimo" a 6.676.105’58 euros, mientras que Félix Millet y Jordi Montull recibieron por su “mediación” un mínimo de a 3.505.895’37 euros.
La Audiencia ordena el comiso de esas ganancias ilícitas, que los condenados deberán devolver o serán hechas efectivas contra su patrimonio. Los ex directivos de Ferrovial acusados han sido absueltos al haber prescrito sus delitos.
La sentencia también declara probado el enriquecimiento ilícito de Millet y los Montull, que “pusieron en práctica una estrategia encaminada a disponer, ilícitamente de cuantiosos fondos del Palau para aplicarlos bien a gastos particulares de ellos o sus familias bien a fines desconocidos, pero en todo caso ajenos por completo a los fines e intereses propios de los entes a los que dichos fondos pertenecían”.
El total de disposiciones de fondos en efectivo efectuadas entre los años
2000 y 2009 por orden de Félix Millet y Jordi Montull, realizadas con cargo a las cuentas bancarias del Palau de la Música ascendó a más de 23 millones de euros.
La resolución judicial ha llegado tras las elecciones del 21-D y a solo dos días de la constitución del Parlament, prevista para el próximo miércoles, 17 de enero.
La sentencia sobre esta macrocausa se conoce ocho años y medio después de que los Mossos d'Esquadra irrumpieran, el 23 de julio de 2009, en el Palau de la Música, un auténtico golpe a uno de los bastiones culturales de la burguesía catalana, en un caso que puso bajo la lupa la financiación de CDC.
En el juicio, que se inició el 1 de marzo pasado y acabó el 16 de junio, tras una cincuentena de sesiones, intervinieron 38 partes procesales: 16 acusados, dos acusaciones públicas, cuatro acusaciones populares y/o populares, cinco responsables civiles a título lucrativo (entre ellos CDC) y once entidades jurídicas como responsables civiles subsidiarias.
Ferrovial hizo hincapié, tras conocerse la sentencia, en que en la misma, se absolvió a los dos directivos relacionados con la compañía. Pedro Buenaventura y Juan Elizaga se quitaron la losa de los delitos de administración desleal y tráfico de influencias que se les imputaban no por no estar probados sino por la prescripción de los mismos.
"Ferrovial Agroman reitera su convencimiento de que las adjudicaciones de obras en que participaba se realizaron siempre de forma regular y a la oferta con mejor valoración económica. La empresa ha sido ajena al destino final de los fondos entregados al Palau de la Música mediante contratos de patrocinio", señaló la compañía en un comunicado.
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