El juez Pablo Llarena ha ordenado la detención y puesta a disposicion del Tribunal Supremo de Anna Gabriel, ante su incomparecencia este miércoles ante el instructor, sin alegar causa legítima que se lo impida. En virtud del articulo 487 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal, este tipo de incomparecencias sin causa pueden convertirse en orden de detención.
La Fiscalía del Tribunal Supremo había pedido al instructor de la causa por rebelión relacionada con el próces que decrete la prisión de la dirigente de la CUP Anna Gabriel tras haberse constatado la mañana de este miércoles, con su ausencia, que está "eludiendo la acción de la Justicia".
Este miércoles era la segunda vez que Gabriel estaba citada para declarar ante el juez Llarena, sin haber comparecido. Para el Ministerio Público, la reacción inmediata de las autoridades judiciales españolas debía ser decretar la prisión de la prófuga.
Minutos antes después de que el juez Llarena ordenara la detención, la exdiputada de la CUP ha asegurado en TV3 que si España solicitara la extradición se pondría en evidencia que el independentismo se le "persigue por una situación política".
Gabriel no se ha mostrado sorprendida por la orden de búsqueda y detención dictada por el Tribunal Supremo contra ella por no haber comparecido, y la ha relativizado al apuntar que "no es una lucha personal sino colectiva", por lo que "hay que seguir reivindicando que todos los presos, exiliados e imputados independentistas queden en libertad", ha apuntado.
La exdiputada también ha anunciado que pedirá asilo si Justicia española solicita su extradición y sólo volverá "a casa" si se archiva la causa.
Ha confirmado también que la CUP ha optado por una "estrategia compartida y desdoblada" ante los tribunales, lo que conlleva que mientras que la también exdiputada Mireia Boya compareciera ante el juez, ella haya optado por no hacerlo y "refugiarse" en Suiza al ver que otros dirigentes sí que están en prisión.