El expresidente madrileño Alberto Ruiz Gallardón ha negado este jueves en la Audiencia Nacional que conociera irregularidad alguna en la compra de la empresa colombiana Inassa en 2001 por parte del Canal de Isabel II, una operación que aprobó su Consejo de Gobierno y que está siendo investigada por ser presuntamente fraudulenta.
Gallardón ha defendido que la adquisición se hizo "con el mejor y el más absoluto de los conocimientos de que era buena para el Canal de Isabel II, para y los madrileños, de acuerdo con la legalidad y con todos los informes jurídicos favorables aportados".
El juez Manuel García Castellón investiga si dicha compra, hecha a través de una empresa panameña y en la que el Canal desembolsó 73 millones de dólares, tuvo un sobrecoste dedicado al pago de comisiones.
En este sentido, y cuando la representante del Ministerio Fiscal le ha preguntado si él cobró alguna comisión, Gallardón ha afirmado sentirse "dolido" por tal duda. "Me da pena que me haga esa pregunta", ha afirmado, según fuentes jurídicas. Durante su declaración, que ha durado cerca de dos horas, ha contestado a las preguntas de la Fiscalía, así como a las de su defensor y el resto de abogados personados en la causa.
Igual que han defendido en días previos el expresidente del Canal, Carlos Mayor Oreja, y el exconsejero de Presidencia madrileño, Manuel Cobo, quienes también han declarado ante el juez, Gallardón ha defendido que fue una buena decisión.
En este sentido, Gallardón ha defendido la transparencia del órgano que tomó la decisión sobre la gestión del agua de Barranquilla (Colombia), "donde había representantes del PP, del PSOE, y sindicatos", según ha afirmado a los medios de comunicación al concluir la declaración. "Espero que cuando acaben las diligencias se certifique que las cosas se hicieron bien y de acuerdo con la Ley", ha concluido.